José Manuel García Margallo siempre ha tenido claro que para que las negociaciones de paz entre Ucrania y Rusia prosperaran, Kiev debía plantearse ceder parte de su territorio. En concreto, el Donbás y Crimea. Pero ahora el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, niega que eso vaya a ocurrir. “Si eso es así, no habrá negociación. Putin no puede regresar a Moscú sin una victoria clara”, ha dicho el eurodiputado.
Los objetivos que Putin se marcó al comenzar el conflicto era la desmilitarización y la “desnazificación” de Ucrania, por lo que las negociaciones de paz pasaban por que Kiev renunciase a entrar en la OTAN, a reconocer la soberanía rusa sobre Crimea y la independencia en las regiones del Donbás.
“Desde el punto de vista militar, aquí se está especulando sobre la posibilidad de que Putin utilice un arma nuclear táctica, de corto alcance, que causaría un daño muy superior a las bombas de Hiroshima y Nagasaki”, ha dicho Margallo.
Occidente ha impuesto sanciones a Rusia para castigarla por su invasión de Ucrania, pero todavía no se ha cortado la enorme fuente de ingresos que tienen con el gas. “Comprarles gas es muy serio, le sestamos inyectando mil millones de dólares al día”, ha explicado el diplomático.
Esta sanción suscita mucha polémica porque países como Alemania tienen una enorme dependencia del gas ruso y cortar el gas supondría que se frenase la industria y se cerrase el aeropuerto de Berlín, entre otras cosas.