Loli Gómez Benito, víctima del Patronato de Protección de la Mujer, una de las instituciones de represión franquista más longeva, ha estado en 'Otro enfoque' contado todo lo que sufrió, vivió y ocurría en aquella época donde el franquismo tenía a las mujeres "ocultadas" en supuestos centros. Todas las jóvenes que acudían a esas instituciones era porque "se rebelaban", eran "modernas" o como en el caso de Loli, vivía una "problemática familiar".
Y es que Loli sufría acoso de su padre y la solución que dieron desde una de las instituciones fue sacarla de casa y llevarla a un reformatorio. "Era insufrible. Me escapé y me volví a casa. Ahí seguían los abusos y fue entonces cuando me quedé embarazada con 14 años de mi padre", desvela Loli, para posteriormente añadir que su padre fue al Tribunal de Menores y dijo lo siguiente: "Está embarazada. Mirad a ver qué hacéis con ella".
La solución fue llevarle a Loli a Peñagrande (Madrid), otra institución franquista. Al llegar a la capital, Loli se quedaba impactada con la cantidad de mujeres que había "con tripas de diferentes tamaños, una que estaba a punto de dar a luz y otras que no se le notaba tanto. Pero todo gente joven. La primera sensación fue de que no me pasaba a mí solo esto... no estaba sola". Desde ese momento, Loli sufrió insultos y vejaciones de todo tipo: un auténtico calvario.
"Para ellos éramos las ovejas descarriadas. Descarriadas a las que había que reconducir", cuenta Loli Gómez en 'Otro enfoque'. Además, recordaba en el programa de Cuatro cuál era su día a día: "Hacíamos todos los oficios. También íbamos al taller a trabajar. Yo personalmente no cobré nunca. Hacíamos cajas de cartón desde cero y también hacíamos souvenirs de la visita del Papa".
Pero el calvario para Loli no acababa aquí. Su madre falleció y un año después, en Semana Santa, su padre fue a visitarla al centro: "No era opcional. No se podía escoger. Si tu padre venía, te llevaba. Me dijeron desde el centro: 'Jueves santo, viernes santo, sábado santo y domingo de resurrección'". El domingo, Loli regresó al centro después de haber sufrido durante cuatro días, de nuevo, abuso por parte de su padre.
Al pasar esos cuatro días y regresar a Peñagrande, Loli no tenía la regla: "Estaba embarazada por segunda vez". Algo que no causó ninguna curiosidad en el centro (nadie le preguntó): "Yo quiero saber quién le dio permiso a mi padre. Finalmente, entregué a mis hijos en adopción".