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En el día Mundial contra el Cambio Climático nos centramos en una de las industrias que más contaminan y que menos recicla: la industria textil. Según informa Lidia Camón en el vídeo, los españoles desechamos 900.000 toneladas de ropa al año y solo el 12% acaba en puntos de reciclado, el resto va directamente a la basura. Actitudes que están destruyendo nuestro planeta.
La industria textil es una de las que más impacto tiene en el medio ambiente y para frenar el cambio climático es vital reducir los residuos textiles. Solo en España se desechan 900.000 toneladas de ropa al año, de las que el 80% va directamente a la basura. El 12% restante termina en punto de reciclado, los más utilizados los de Cáritas o Humana.
El reciclado de prendas textiles es distinto por comunidades autónomas. Los más concienciados son los vascos, reciclan el 25% de la ropa. Los menos, los extremeños apenas un 3%.
La falta de concienciación lleva a actitudes que están destruyendo nuestro planeta y las consecuencias del cambio climático ya están aquí y cada año son peores. Si no lo remediamos, dentro de 25 años los 50 glaciares del patrimonio mundial estarán derretidos completamente y en el año 2.100 diremos adiós a las islas Maldivas.
Podemos pensar que esas catástrofes nos pillan muy lejos y que no lo verán nuestros ojos, pero las consecuencias trágicas del cambio climático las estamos viviendo ya. Los glaciares expulsan 58.000 millones de toneladas de hielo cada año al mar y aumentan su nivel un 5%.
El aumento del nivel del mar unido al aumento de las emisiones de CO2 provocan inundaciones nunca antes vistas en Europa y dejan a Venecia por debajo del agua, dicen los expertos que le quedan 50 años de vida.
Otro ejemplo actual de que ya estamos sufriendo las consecuencias del cambio climático lo encontramos en las estaciones de esquí, en algunas de ellas ya solo se deslizan con nieve artificial.
Lo científicos nos alertan día tras día. “La situación va a peor”, dice Jorge Olcina, climatólogo, “no va a mejorar porque las emisiones que lanzamos a la atmósfera son cada vez más abultadas, no conseguimos frenar el uso de combustibles fósiles, por tanto, el proceso actual del cambio climático está desbocado”.
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