Influencers vs. dermatólogos: advierten del peligro de usar cosméticos sin la recomendación de un experto

Rutinas de cuidado de la piel o skincare, recomendaciones de productos, tratamientos, son algunas de las cosas más virales en las redes sociales. Diariamente, miles de influencers inundan sus perfiles con recomendaciones y campañas de publicidad de cosmética. Lo que no te cuentan es que varias veces, esa clase de productos son de todo menos beneficiosos para nuestra salud, tal y como informan Maialen Larrinaga e Idoia Rivas.

El blanqueamiento de numerosos productos en redes sociales ha causado el enfado de los dermatólogos. Estos denuncian que cada vez son más los influencers que se dedican a hacer recomendaciones que pueden causar daños, en ocasiones irreparables, para nuestra salud. Indignado, el dermatólogo Julio Heras, nos explica las consecuencias que muchos productos pueden tener: "vemos dermatitis alérgicas, vemos incluso problemas que a la larga pueden provocar cáncer cutáneo. Es decir, estamos hablando de cosas serias por unos productos que no están validados por la comunidad científica".

Los usuarios son muy influenciables ante las recomendaciones de los creadores

Hacerse viral en Internet no es complicado, pero el problema viene cuando los creadores de contenido quieren inculcar sus rutinas sin ser expertos en la materia, ya que, como nos comenta una usuaria de Internet, "muchas veces ayuda a que compres algo, te influencia". Hace unas semanas, se viralizó un video de una chica que estuvo a punto de perder un ojo por utilizar un producto recomendado por una influencer. Por desgracia, no es el único caso. Hay que llevar mucho cuidado con las cosas que se suben a Internet. Una usuaria vio como una conocida creadora de contenido "recomendaba productos con ácido hialurónico y eso era muy peligroso porque su público era en su mayoría niñas pequeñas".

Los jóvenes son los más influenciables, además de ser el mayor público de este tipo de contenido. Muchos influencers se lucran de esta inocencia y falta de información para recabar más tráfico en sus cuentas y en ciertas ocasiones, dinero a costa de campañas publicitarias. No se sabe hasta que punto va a llegar esta problemática, pero como declara Heras, "por desgracia no va a parar hasta que la sociedad se conciencie de que quien tiene que decir las cosas relacionadas con la salud son los profesionales sanitarios".

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