Según la Organización Mundial de la Salud, el cáncer es la principal causa de muerte en el mundo. Solamente en 2020 murieron casi 10 millones de personas debido a la enfermedad y se detectaron cerca de 20 millones de nuevos casos en 2022. La OMS añade que 1 de cada 5 personas desarrollará un cáncer a lo largo de su vida, aunque poco a poco van surgiendo avances científicos y terapias que aumentan la supervivencia. Desgraciadamente, este tipo de enfermedad la tenemos muy normalizada a día de hoy, pero ¿qué efectos pueden tener sus tratamientos?
La quimioterapia, radioterapia u operaciones quirúrgicas son algunos de las tratamientos más frecuentes en pacientes oncológicos. La realidad es que la gran mayoría de ellos son muy invasivos y tienen efectos secundarios. Uno de ellos es el deterioro de la salud sexual, sobre todo en mujeres. La sexualidad siempre se ha tomado como un tabú en la sociedad, pero ha llegado el momento de visibilizarla como se debe, y por ello se creó 'La Higuera'.
En 2023, un grupo de tres mujeres supervivientes de cáncer constituyeron 'La Higuera', una asociación sin ánimo de lucro con el objetivo de reivindicar la salud sexual de las mujeres, y en particular, la de aquellas que sufren o han sufrido cáncer en algún momento de su vida. El equipo de Noticias Cuatro ha podido hablar con dos de sus integrantes, ambas supervivientes de leucemia, que se dieron cuenta que nadie alzaba la voz sobre los problemas sexuales que generaban los tratamientos oncológicos: "Conllevan una serie de problemáticas que, si no les damos voz, no podemos solucionar", declara Sara Manzano.
El proceso de cura de una enfermedad tan invasiva conlleva numerosos efectos secundarios. La salud sexual y la libido se ven completamente condicionados en este tipo de tratamientos. Los niveles hormonales pueden variar, además que el cansancio, el dolor y otras complicaciones físicas pueden deteriorar la salud sexual de forma directa. "Ya no es que físicamente te puedan quitar un pecho, es que te quitan los ovarios para no producir estrógenos, te producen una menopausia sin tenerla", explica Araceli, mujer en tratamiento desde hace seis años.
'La Higuera' se encarga de dar visibilidad al problema y de organizar talleres especializados con mujeres afectadas. El fin de ellos es mejorar la vida sexual de las pacientes y reivindicar un tema que se ha guardado siempre en la intimidad. Algunas de las alegaciones más frecuentes son "de falta de libido a sequedad vaginal, atrofia vaginal y relaciones sexuales dolorosas", según Elordi García, integrante de la asociación. Araceli es una de las afectadas que se atreve a alzar la voz: "A mí solo con que me toquen la piel no me apetece, pero yo quiero seguir disfrutando de mi sexualidad como hasta ahora, pero es que no tengo ganas. Entonces me tengo que esforzar, porque si no me esfuerzo se complica más".
Cada vez son más las mujeres que se atreven a reivindicar su sexualidad. Los problemas que los tratamientos de cáncer ocasionan sobre la salud sexual son más que evidentes, pero gracias a asociaciones como 'La Higuera', poco a poco van teniendo visibilidad en nuestra sociedad.
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