Las intensas y continuadas lluvias de los últimos días en el Pirineo oscense como consecuencia de la DANA instalada en buena parte de la Península están provocando numerosas incidencias, según informan Patricia Vallés y Patricia Corral. Varias poblaciones permanecen en alerta ante las crecidas de ríos como el Cinca y el Ésera.
El túnel de Bielsa se ha cerrado al tráfico en ambos sentidos por desprendimientos en la zona francesa, según ha informado el Gobierno de Aragón. A ello hay que sumar un socavón aparecido en el kilómetro 86,5 de la A-138, que ha quedado cortada, según ha trasladado la Delegación del Gobierno en Aragón.
También, Urdos, del lado francés, permanece cortada la RN-134 en ambos sentidos por varios desprendimientos que se han llevado por delante un tramo de la carretera, lo que ha llevado a la clausura del túnel de Somport. Además, ha quedado cortada la A-139 en Llanos del Hospital por un desprendimiento entre los kilómetros 67,5 y 72.
En cuanto a la situación de los ríos, según traslada el Gobierno de Aragón el caudal de río Cinca a su paso por las localidades de Aínsa y Lafortunada se encuentra en estos momentos en nivel rojo, tras haber alcanzado los cinco metros de altura, aunque ya va de bajada, mientras que el embalse de Pineta está en situación de emergencia y desembalsa 160 metros cúbicos por segundo.
El Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento (SPEIS) de la Diputación de Huesca (DPH) ha atendido esta pasada madrugada numerosas incidencias que se han concentrado en Sabiñánigo y varios núcleos cercanos.
La intensa lluvia ha inundado partes bajas y garajes de algunas viviendas así como de una residencia de la tercera edad, lo que ha llevado a los Bomberos de la DPH a tener que realizar varios achiques de urgencia.
En la Ribagorza, el Ayuntamiento de Castejón de Sos ha evacuado de manera preventiva dos viviendas en la localidad ante la crecida del barranco de Urmella y se están realizando también achiques en la zona de Seira.
Además, el SPEIS ha evacuado a un matrimonio de su vivienda que había quedado inundada en Escuer, en el Alto Gállego, y este sábado se ha desplazado a Torla-Ordesa (Sobrarbe) ante la posibilidad de nuevas inundaciones por la crecida del río Sorrosal.
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