En las calles de Huétor Tájar (Granada), el luto ha llenado las calles de un silencio que ha encogido el corazón de todos los vecinos. Todo después de que un hombre matase a sus dos nietos. El informe preliminar de la autopsia revela que uno de los dos murió de un disparo en el costado y el otro por asfixia, según informa Patricia Vázquez. Todavía no ha trascendido la hora exacta en la que ocurrió, dato clave para conocer cómo ocurrieron los hechos.
El informe de la autopsia llega después de que el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número dos de Loja haya declarado secreta la investigación durante un mes. Los vecinos de esta localidad siguen consternados tras recalcar que este hombre era un abuelo ejemplar. Pero confiesan que algo se rompió dentro de él tras el accidente en el que murieron su mujer y su hija.
El abuelo de los niños visitaba todos los días las tumbas de su mujer y de su hija. Él conducía el coche en el que también iban sus nietos, pero ellos sobrevivieron. El hombre de 72 años se quejaba de que su yerno no le dejaba a los niños tanto como quería, el motivo que provocó la discusión entre los dos la tarde del domingo. Le amenazó con una escopeta y se llevó a los pequeños.
El hombre de 72 años los mató en su vivienda de Huétor Tájar antes de suicidarse con una escopeta de caza. La Guardia Civil no consiguió convencerlo para que los dejara ir. El último mensaje que recibió el progenitor de los pequeños fue a las 23:00 horas, cuando el mayor de los dos le preguntó si se podía quedar a dormir con el abuelo. Fue la última vez que escuchó su voz. Ahora, se está a la espera del entierro de los menores -que podrá celebrarse mañana- mientras los psicólogos ayudan a sobrellevar el duelo a los menores afectados por el caso.