El informe de la revista The Lancet asegura que las muertes por calor han crecido un 9% en Europa. Según informa Irene Fernández en Noticias Cuatro, el cambio climático impacta directamente sobre nuestra salud. En la última década (2013-2022) murieron de media 17 personas más al año que en la anterior década, el doble de mujeres que de hombres.
El calor hace que hagamos menos deporte, que aumenten las bacterias y la transmisión de enfermedades como el dengue, el zika, la malaria y algunos parásitos como las garrapatas. El impacto económico que genera es de 18.700 millones de euros en pérdidas al año, el 0,8% del PIB europeo.
Según los autores del estudio es un calentamiento sin precedentes y unas muertes que se disparan sobre todo en el sur de Europa, donde los termómetros no paran de batir récords. Los científicos llevan mucho tiempo advirtiendo, la salud y el cambio climático van de la mano
Ignacio López Goñi, microbiólogo de la Universidad de Navarra, explica: “No es solo que llueva más o menos, o que tengamos sequía, sino que eso puede tener una consecuencia en nuestra salud”. Esto lo constata el nuevo informe de la revista The Lancet, se centra en Europa porque la crisis climática está afectando ya y sus efectos se notan en el continente.
El estudio está firmado por casi 70 científicos, liderados por el Barcelona Super Computing Center (BSC). Rachel Lowe, investigadora del BSC, cuenta: “Nuestro informe da pruebas de un aumento preocupante en los impactos del cambio climático en la salud”. Las temperaturas en Europa están subiendo el doble de la media global y sus consecuencias ya han llegado.
La mortalidad relacionada con el calor ha aumentado un 9% en el continente y en los países del sur mucho más, un 11%. Rachel Lowe afirma: “Es peor que en el resto de Europa, sobre todo en España”. Afecta el doble a las mujeres y Rachel Lowe expone: “Es una combinación de factores biológicos y socioeconómicos”.
Con el aumento del calor llegan a Europa enfermedades de otras latitudes. Rachel Lowe comenta: “Cada vez hay más brotes de enfermedades como el dengue o el chikungunya en varias partes de Europa”. El informe constata un aumento de la sequía en todo el continente, también de las olas de calor o de los fenómenos extremos.
Conocer todas estas consecuencias es clave para el diseño de planes de adaptación. Rachel Lowe dice: “Necesitamos medidas urgentes para adaptarse y mitigar los impactos peligrosos del cambio climático para la salud”. Esta situación provoca que aumenten las desigualdades sanitarias en un mundo con una tendencia a calentarse.
Estos impactos interrelacionados sobre la salud tienden a distribuirse de forma desigual entre las poblaciones. Es debido a las diferencias en la exposición, de la sensibilidad y de la capacidad de adaptación. Los hogares con bajos ingresos tuvieron una probabilidad sustancialmente mayor de sufrir inseguridad alimentaria.