El Párkinson es la segunda enfermedad neurodegenerativa más común en nuestro país, tan solo detrás del Alzhéimer. En el mundo hay 10 millones de afectados y en nuestro país 160.000, una cifra que se triplicará en 25 años. Aunque no tiene cura, los medicamentos han mejorado la vida de personas como la de Fernando Álvarez mientras se consiguen más avances como el del Hospital de la Princesa.
Fernando tiene 54 años y hace tres que le diagnosticaron Párkinson. “Cuanto estaba en la consulta me dijeron que mi forma de andar y el dolor al balancearme hacia delante era porque tenía esta enfermedad”, recuerda. Pero ya sufría otros síntomas antes.
En el Día Mundial del Párkinson hablamos con Fernando, uno de los 160.000 casos que hay en España con esta enfermedad y que hasta ahora es incurable. Existe mayor incidencia entre los hombres y más mortalidad entre las mujeres. Él llevaba un tiempo sufriendo unos síntomas que no sabía a qué se debían: “Temblores, rigidez, dificultad para hablar en algunos casos y a la hora de manejar objetos pequeños con las manos”, explica. El 15% de los hombres que lo padecen tienen menos de 50 años.
“La enfermedad en personas jóvenes no es excepcional. Hasta un 15% llegan al diagnóstico”, sostiene Jorge Máñez, neurólogo de ‘Vithas’. “Se puede tener esta enfermedad sin temblor. Un dolor de hombros o una rigidez en la muñeca se achaca siempre, en determinadas edades, a cualquier cosa menos al Párkinson”. Esto retrasa el diagnóstico y el tratamiento. “Hay que ser muy riguroso porque no sabemos en qué momento de la batalla se puede revertir”, indica Fernando. En 25 años se triplicará la cifra por tener una población más envejecida.