En España ya se trabaja en un modelo de lenguaje de Inteligencia Artificial en castellano y en las lenguas cooficiales, según anunció Pedro Sánchez en la cena inaugural del ‘Mobile World Congress’. De esta manera se pretende que España tenga un papel relevante en el desarrollo de la Inteligencia Artificial.
El presidente del Gobierno comentó que se va a trabajar en colaboración público-privada con el Barcelona Supercomputing Center, la Red Española de Supercomputación, la Academia Española de la Lengua y la red de academias en la construcción de un gran modelo fundacional de lenguaje de Inteligencia Artificial. Se hará mediante el entrenamiento específicamente en español y, por supuesto, en las lenguas cooficiales.
El Rey Felipe VI, respecto a los retos que plantea la Inteligencia Artificial, transmitió que todos los actores del ecosistema móvil en expansión trabajen juntos para garantizar que las redes sean más adaptables, automatizadas, rentables y sólidas, proporcionando a las empresas y a los consumidores nuevas soluciones.
Jesús Cerquides, del Instituto de Investigación IA/CSIC, cuenta que ChatGPT detrás tiene un modelo de lenguaje que está entrenado por la empresa OpenAI, y el 90% de los documentos en los que está entrenado están en inglés. La eficiencia en inglés de este modelo de lenguaje es muy alta, mientras que en el resto de los idiomas esa eficiencia se reduce.
Los modelos de lenguaje, como ChatGPT, son el motor que está detrás de aplicaciones como estas. Al hablar de Inteligencia Artificial, se trata de entrenar y de hacerlo a base de texto, por lo que, si apenas hay contenido en español, el rendimiento en nuestro idioma no será bueno. Es muy importante, ya que cada vez usamos más la Inteligencia Artificial para todo.
Jesús Cerquides también dice que la idea es que en esta biblioteca en la que se entrenan estos modelos de lenguaje haya más documentos en castellano y en lenguas cooficiales. Si nosotros tenemos iniciativas propias, podremos de alguna manera controlar esa tecnología. Ya hay países como Francia o Finlandia que han hecho proyectos parecidos.