El uso de los pesticidas en el campo, a debate: por qué los defienden los agricultores

Los pesticidas han sido motivo de disputa en la última semana entre agricultores franceses y españoles. Nuestros vecinos nos acusan de usar más pesticidas que ellos y así llevarnos más negocio. Los datos confirman que esto no es así, de hecho España está por debajo de la media europea en uso de pesticidas. Por su parte Europa cede y aparca la reducción de los pesticidas. Estos son los motivos por los qué los agricultores defienden su uso en el campo y su importancia.

La polémica por el uso de los pesticidas no cesa. Por un lado, los agricultores franceses acusan a los españoles de usar más pesticidas que ellos. Pero los datos confirman que no tienen razón. Según explica Beatriz Benayas en Noticias Cuatro, las cifras de ventas de pesticidas que sirve Eurostat “es cierto que España es el país que más vende seguido de Francia e Italia”.

Por otro lado, si revisamos el uso de pesticidas por hectárea cultivada, “España no sólo no es el país que echa más pesticidas a sus campos de frutos y hortalizas si no que está por debajo de la media europea y sobre todo, por debajo del uso que hace Francia”.

Europa cede a las peticiones de los agricultores

Europa ha cedido a las peticiones de los agricultores y aparca la reducción del uso de los pesticidas. Ahora, se abre el debate sobre por qué defienden los agricultores seguir utilizándolos y su importancia

La idea desde la Unión Europea era recortar en un 50% el uso de pesticidas, pero ante las protestas de los agricultores que se han sucedido por toda el continente, la Comisión Europea ha dado un paso atrás. Desde WWF defiende que se ha perdido "una oportunidad histórica para la salud humana y para los propios productores" y recuerdan que "una de las principales causas de contaminación de aguas en España es por este tipo de productos que se usan en agricultura".

Pero mientras los ecologistas lo ven como un retroceso, los agricultores cosechan el fruto de sus protestas y afirman que se trata de "un falso ecologismo". Una opinión compartida por los vendedores de estos productos que veían esta nueva ley un tanto hipócrita, "queremos que las limitaciones que nos pongan a nosotros los tenga también de productos que vienen de fuera".