Un hombre armado secuestra un autobús urbano en Los Ángeles con varios pasajeros en su interior. La persecución policial, digna de una película de ficción, deja a cualquiera sin palabras. Durante más de 11 kilómetros, el secuestrador apunta con un arma al conductor por la ciudad.
A la 01:00 de la madrugada, un hombre secuestra un autobús con dos personas en su interior sin contar al conductor. El vehículo, que tuvo más de 15 coches de Policía persiguiéndole, tenía un letrero en el que podía leerse: “Emergencia. 911 Llame a la Policía”. El mensaje pudo leerse gracias a que el propio conductor presionó el botón.
La persecución policial del autobús secuestrado dejó momentos más similares a una historia de ficción. Mientras varios coches iban detrás del vehículo, varios agentes le tiraron varios cepos durante la tensa travesía. Algunas de las tiras no funcionaron y las que sí lo hicieron, no impidieron que el vehículo secuestrado siguiera su camino con una rueda reventada.
Tras frenar en un en una intersección cerca del Distrito de las Artes de la ciudad, varios agentes con un escudo inmovilizaron el autobús, anulando su batería y manipulando los depósitos traseros. Dentro del vehículo, había varias personas, una de ellas con una herida de bala.
Los SWAT llevaron a acabo la operación de rescate con granadas de distracción y detuvieron al secuestrador. El conductor, que salió por la ventanilla, y el pasajero ileso fueron atendidos cerca del autobús. El herido de bala murió pocos minutos después de llegar al hospital.
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