Este mediodía ha vuelto a aparecer el príncipe Guillermo en un acto oficial en Windsor (Inglaterra). En este acto se celebraba una investidura donde se ha reconocido la trayectoria de personas célebres como la de la exfutbolista Ellen White. El príncipe de Gales ha sustituido a su padre, el rey Carlos III, que está alejado de todos sus compromisos desde que el lunes se diera a conocer que tiene cáncer. Guillermo se encontraba retirado de la vida pública desde hace tres semanas debido a la convalecencia de su esposa Kate Middleton tras una operación abdominal.
Carlos III seguirá gestionando las cuestiones de Estado, así que por ahora no se requerirá de la intervención del Consejo de Estado. Como consecuencia del tratamiento médico que deberá seguir, sus apariciones serán mucho más limitadas, por lo que la reina Camila, su hijo Guillermo y los demás miembros de la familia deberán gestionar la mayoría de su agenda.
La oficina de prensa del Palacio de Kesington, la residencia del príncipe ubicada en Londres, ya anunció el pasado lunes las citas a las que iba a acudir Guillermo. Esto ocurrió poco antes de que la oficina de prensa del Palacio de Buckingham revelase que el monarca tenía cáncer y de que se descartase que este fuera de próstata. Desde Buckingham informan que Carlos III continuará con sus tareas de despacho como Jefe de Estado. Entre estas tareas continuará sus reuniones semanales con Rishi Sunak, el primer ministro de Reino Unido, ya sea personalmente o a través de videollamada; pero no asistirá a los actos públicos.
Esta noche, el príncipe de Gales asistirá a su segundo compromiso. Es una cena de gala destinada a recaudar fondos para la ‘London’s Air Ambulance Charity’. Cabe destacar que Guillermo trabajó como piloto de ambulancias aéreas cuando era joven, así que es probable que se reencuentre con antiguos compañeros. También realizará un discurso en medio de la gala. Y respecto a la relación del príncipe con su hermano Harry, sigue sin haber ningún avance. El Duque de Sussex visitó a su padre Carlos en el día de ayer en su residencia de Clarence House en Londres. El encuentro no llegó a la hora de duración y después el Rey se desplazó hasta su finca de Sandringham y Harry a un hotel.