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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se querella contra el juez Juan Carlos Peinado por prevaricación. Es decir, por tomar decisiones injustas a sabiendas de que lo son. Según informa Isabel Sanz, por primera vez en la historia, un jefe del Ejecutivo en ejercicio ha declarado como testigo ante un juez en el Palacio de la Moncloa tras negarle la opción de hacerlo por escrito. El jefe del Ejecutivo se ha acogido a su derecho de no declarar para no perjudicar a su mujer, Begoña Gómez, en su investigación sobre tráfico de influencias y corrupción.
El juez Peinado ha llegado al Palacio de la Moncloa en el asiento del copiloto de un coche azul. Y lo ha hecho a las 10:20 de la mañana, cuando se ha presentado en la sede de la presidencia en mitad de una enorme expectación. El vehículo ha pasado todos los trámites de seguridad antes de entrar en el recinto y protagonizar una imagen sin precedentes.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha interpuesto una querella ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid en la que pide que se llame a declarar al juez Peinado y a su sustituto, Carlos del Valle. Los dos dictaron providencias señalando su declaración presencial y no por escrito. Así, continúa la causa del magistrado Peinado contra Begoña Gómez y el jueves declarará el empresario Barrabés. A partir de ahí, lo que pueda ocurrir es una incógnita.
Sánchez se ha acogido a su derecho a no declarar ante el juez que investiga a su mujer, Begoña Gómez, por tráfico de influencias y corrupción. El jefe del Ejecutivo se ha apoyado en el artículo 416 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECrim), una norma que especifica que, como cónyuge, está “dispensado de la obligación de declarar”. En la citación se han personado el juez Peinado, la Fiscalía, los abogados de las defensas y la letrada de Vox, Marta Castro, como representante de la acusación popular. Ante los medios, Castro ha asegurado que Sánchez ha estado “impávido y altanero” como a su juicio se le ve en el Congreso de los Diputados.
La declaración -que ha durado unos 20 minutos por cuestiones técnicas- se ha celebrado en un “despacho habilitado a tal efecto”. Tal y como ha asegurado la portavoz de Vox, el magistrado no ha permitido que se le hiciesen preguntas tras la negativa del presidente a declarar. Antes de su cita con el juez, el presidente del Gobierno ha presidido el Consejo de Ministros, donde el Partido Popular ha aprovechado para lanzar sus ataques.
El portavoz del PP, Miguel Tellado, ha sentenciado que el jefe del Ejecutivo se convierte “en más sospechoso que nunca” tras haberse acogido a su derecho a no declarar. El foco judicial y político del día ha estado en Moncloa, donde una veintena de seguidores de ‘Hazte Oír’ -una de las acusaciones- se ha concentrado en uno de los accesos reclamando prisión para Sánchez y apoyando al juez Peinado.
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