Cristina cree mucho en las energías y cuando entra en un espacio nota si hay buena vibra o no. Soñaba con venir a ‘First Dates’ y ha comenzado a vivir la experiencia con mucha ilusión. Le ha dicho a Carlos Sobera que le gustaría que su cita fuera un tipo con rollo, parecido a ella, sin ningún tipo de drama y con mucha alegría, alegría… Cree que nada pasa por casualidad, que todo tiene un aprendizaje y que hay que ver lo positivo de cada cosa. Lleva un año sola, pero quiere ir poco a poco, conocer a la persona y poco a poco ver las posibilidades de algo más.
A Roger, su cita, le gusta mucho la familia. Al verle, Cristina ha sentido que era buena persona y se han sorprendido al saber que los dos eran de Barcelona. Él también se ha llevado una buena impresión y han comenzado la cita con muchas ganas.
Mientras cenaban, Roger ha querido saber si vivía sola y ella le ha dicho que era hija única y que hace unos meses se llevó a vivir con ella a su madre de 80 años. El padre de Roger tiene 91, viven muy cerca y por lo menos un día a la semana va a comer con ellos. Cristina le ha dicho que no había sido madre porque nunca había tenido el instinto de ser madre y que tampoco había querido casarse porque le gusta ser libre. Él, sí tiene una hija, pero también siente que no es necesario formalizar con un papel una relación.
Los solteros han coincidido en su pasión por viajar, pasear por la naturaleza, preferir la montaña a la playa e incluso, comer fuera y probar diferentes gastronomías. Incluso, ambos han bromeado con tener unos kilitos de más, pero mientras que Roger estaba sintiendo cierta conexión, Cristina pensaba en que le solían gustar perfiles más deportistas y con otro físico.
Roger le ha confesado que había venido a ‘First Dates’ con bastante miedo, pero que estaba encantado de haberla conocido porque era una persona muy positiva con la que poder hablar de todo. Ella también ha visto a un buen tipo que podría ser su amigo, pero nada más. Le gustaría volver a quedar con él, pero no sabe si como pareja porque la primera chispa de la pasión “no la he sentido”.