Un soltero ‘Aquaman’ espanta a su cita en ‘First Dates’: “Lo cambiaría entero, empezando por la trenza”

Cuando está en el mar, Rubén siente la relajación y el aire que la ciudad no le da “me siento relajado, me siento cómodo”. Es profesor de historia, pero trabajaba de profesor de buceo en la Comunidad Valenciana “me apodan ‘Aquaman’”. Practica todo tipo de deportes acuáticos y pasa más tiempo en el agua que en suelo firme. Laura Boado se ha fijado en su trenza y Rubén le ha contado que era una promesa que le hizo a su compañera de hospital cuando sufrió una apendicitis con tan solo 8 añitos.

En el amor, lo más bonito que ha tenido fue con una chica gallega “fue un amor de dos años, pero acabé descubriendo que yo era la tercera persona”. Desde ese momento, no ha sabido o querido abrirse a nuevas relaciones. Le gustaría que su cita en ‘First Dates’ sea una chica agradable, divertida y fiel.

Gabriela, su cita, busca a una persona que quiera una relación seria, que quiera formar familia, tenga estilo y el pelo largo “si no, no me vale”. Al conocer a Rubén, le ha contado que era de Brasil y que justo estaba cumpliendo años en Madrid, pero ha sentido que entre ellos no había feeling ninguno. No le ha gustado ni su forma de vestir ni su ropa.

A Rubén le gusta mucho la carita de modelo de su cita en ‘First Dates’

La cena ha comenzado hablando de lo primero que les entraba por el ojo y Gabriela ha sido muy clara “el estilo, la ropa”. A Rubén le llama mucho la atención la cara, lo que transmiten los ojos de la persona y luego ya, conocer a la persona. En su cita estaba viendo a una mujer muy bella y con un cuerpo que le resultaba muy atractivo, pero ella “lo cambiaría entero, empezando por la trenza”.

Rubén ha querido saber por qué había venido a España y ella le ha dicho que había venido porque su madre estaba aquí y quería encontrar una vida mejor. Gabriela le ha explicado a Rubén que ella necesitaba feeling y que era muy celosa, y no le gustaba nada que cuando estaba con un chico, este mirara a otro.

El soltero le ha dicho que él una mirada no lo consideraba motivo de enfado, pero que si se enfadaría por un contacto por redes sociales. Un detalle que les ha separado más todavía. Rubén ha insistido en qué tipo de chica le gustaba a Gabriela y cuando le ha pedido que le puntuara, ella ha sido sincera y le ha dicho que no era su prototipo de chico, pero que podían ser amigos.

A Gabriela le molesta que su cita no pague la cena

Rubén lo ha entendido y él se ha quedado tranquilo porque no le había gustado que fuera tan celosa. Ella tenía claro que no quería tener nada con él, pero no le ha gustado nada que él no la invitara a cenar. En el momento de la decisión final, Rubén le ha dicho que él si había estado cómodo, pero que no le había notado receptiva y que la esperaba en Valencia para tener una cena de amigos.