Manuel se muere de la pena al dar calabazas a su cita en ‘First Dates’: “Puedes cambiar de opinión”

Manuel se define en ‘First Dates’ “como un pedazo de maricón, es una forma de vida. Está el homosexual, el gay y luego está el maricón, que es el que hace activismo y el que, aunque esté en zona de privilegio, defiende a todo el mundo”. Se vino a vivir a Madrid y asegura vivir en el piso más “LGTBI del barrio de Salamanca”, sus tres compañeras son “bolleras”. Le suelen gustar los tipos que tienen pinta de “mandarme siete años a terapia” y se ha ilusionado al saber que se llamaba Salvatore “Si es un amigo, un amigo, un folleteo, pues un folleteo y si es el amor de mi vida, que me mantenga”.

Salvatore, su cita, se ha presentado como un tipo que quiere explorar los límites de su sexualidad más allá de la bisexualidad y de los esquemas establecidos. Al verle con pincitas en la cabeza, Carlos Sobera ha pensado que “salías de la cama con los rulos puestos” y él se ha reído, y le ha confesado que casi acertaba. Le gusta sentirse como una mariposa muy rosa y sentirse alegre.

Al verle, Manuel ha sentido que le iba a caer bien y que era muy como sus amigas NB y rápidamente han comenzado a hablar. El soltero ha querido saber si era italiano y Salvatore le ha contado que sus padres eran venezolanos, pero que sus abuelos sí eran italianos y que de pequeño iba mucho y aprendió a pedir una tarrina de helado en el idioma.

A Salvatore le ha sorprendido que su cita viviera en el barrio de Salamanca porque él no tiene tanto poder adquisitivo. Él está estudiando Antropología y le ha explicado a su cita en qué consistía su futura profesión. Manuel estaba encantado con su cita porque tenía mucha personalidad y ha querido saber si había ido a alguna fiesta travesti. Salvatore le ha dicho que no salía mucho de fiesta y que era súper fan de Kali Uchis, pero él se quedó en Lana Del Rey.

Manuel ha ido a un colegio católico “salí sabiéndome todas las canciones y a ponerme de rodillas”. Salvatore ha querido saber si ya no era católico y ha intentado engañarle diciéndole que él sí.

Salvatore ha querido saber si su cita era marica o cuál era su condición y Manuel le ha explicado que él era “Maricón cis”, y al saber que su cita era no binario, le ha pedido que lo explicara, pero Salvatore le ha dicho que él no es nadie para explicar nadie, que está cansado de tener que justificar su sexualidad y que con vivir tiene bastante.

En el tema de las relaciones, Manuel le ha contado que tuvo una relación seria con 16 años y Salvatore le ha confesado que se arrepentía de haber perdido la virginidad con tan solo 14 años porque siente que se puso en peligro “ahora hubiera esperado algo más”. Manuel ha tenido claro que había conectado con su cita a nivel amistad y que entre ellos no iba a surgir nada romántico afectivo.

En el momento de pagar, Manuel estaba tan contento de haber conocido a Salvatore que le ha invitado a cenar y le ha sacado los colores. Salvatore le ha dicho que sí a una segunda cita y Manuel se ha muerto de la pena al decirle que solo quería una amistad “puedes cambiar de opinión sí quieres”.