Jaume es un soltero que vive con su madre y que lleva muchos años soltero. Ha sorprendido a Carlos Sobera con un retrato tipo comic, algo que le encanta hacer y le ha contado que estuvo casado 15 años, pero que su mujer le engañó con otro. Busca a una persona agradable, con conversación y a la que le guste ir al cine, y a pasear.
Yolanda, su cita, es un mujer moderna y apañada. Intenta estar activa y el deporte es fundamental en su día a día “me gusta mucho la vida saludable”. Su primer encuentro con Jaume ha sido accidentado porque él le ha pisado un pie, pero el soltero ni se ha dado cuenta porque estaba encantado con ella.
La soltera no ha encontrado un físico que le gustara, pero ha querido conocerle y le ha ofrecido brindar por la experiencia. Antes de empezar a degustar la cena, Jaume le ha entregado a Yolanda el dibujo que había traído para ella y a la soltera le ha encantada “me ha parecido un detalle muy bonito”.
La cita parecía que había comenzado bien, pero ella ha querido saber si su cita hacía deporte y al saber que no, le ha dicho que para ella era esencial. Jaume le ha dicho que él se adaptaba a todo y que podría empezar a ir al gimnasio en cualquier momento, pero también le ha dicho que fumaba y eso a ella, le ha matado. Él ha matizado que no fumaba mucho y que lo hacía en ocasiones especiales, pero ya era tarde.
A los solteros les ha tocado hablar de sexo y ella le ha dicho que su fantasía sexual era sentir con los ojos tapados, algo que a Jaume le ha parecido estupendo, pero ella le ha dicho que necesitaba tener atracción. El soltero le ha contado que él llevaba muchos años fuera del mercado y Yolanda se ha asustado al saber que no había encontrado pareja en 15 años “igual es una bellísima persona, pero eso me echa para atrás”.
En el momento de pagar la cuenta, Jaume ha querido invitar, pero ella ha dejado claro que prefería que pagaran a medias, y es que tenía claro que no quería repetir. Le ha dicho que le había hecho sentirse muy cómoda y que se le veía que tenía un gran corazón, pero que ella no había sentido la atracción que esperaba.