“Conocerte en las cuatro estaciones”, lo que una soltera de ‘First Dates’ necesita para enamorarse

Belén tiene claro que el matrimonio es lo más incompatible con el amor “el matrimonio rompe el amor” y nunca ha querido pasar por el altar. Es una mujer a la que le encanta conocer gente y hacer cosas “soy una gata que necesita su espacio, pero que cuando lo necesita es cariñosa”.

José, su cita, es un tipo con tres hijos y tiene claro que son su vida “si la persona que está conmigo no lo entiende, no puede ser”. Al conocerse, Belén le ha dicho que era de un pueblo de Córdoba y se ha sorprendido porque él era de Madrid. A la soltera no le ha gustado nada el look de su cita y ha sentido que no se había arreglado lo suficiente, y que tenía que haberse puesto otra ropa para la cita. Además, lo de que tuviera tres hijos, tampoco le ha ilusionado.

Mientras empezaban a cenar, José le ha contado a Belén que tenía tres hijos y que se divorció cuando el pequeño tenía un mes “la pillé siéndome infiel”. Ella nunca se ha casado y a los cuarenta se le quitaron las ganas de ser madre por lo que no sabe si sería capaz de estar con alguien con tres hijos. Eso sí, han coincidido en que él vive en Alcorcón y ella está trabajando allí, pero ha pedido el traslado a su pueblo.

La soltera no siente que la distancia sea un problema para una relación, pero sí le ha dejado claro que a ella no le gustan las relaciones por WhatsApp. Una de las pasiones de Belén es viajar y le ha explicado a su cita que le gustaba viajar sola. A José le ha parecido estupendo y ella se ha sorprendido porque a sus anteriores parejas no les gustaba demasiado. Además, ha sentido que no es fácil encontrar a una pareja que también sea un compañero de viaje porque ella es muy especial para viajar. Le gusta ir de mochilera, dormir en albergues para socializar… “Ahora no me quito de la cabeza es Groenlandia”.

En el amor, ella le ha dicho que busca a un compañero que le de vida y que le proponga hacer cosas, que para enamorarse necesita “conocerle en las cuatro estaciones” y saber cómo es cuando está enfadado, triste o está muy contento. José le ha dado la razón y eso a ella le ha gustado “me ha hecho sentir muy bien”, pero también le ha hecho dudar “igual me ha mentido”.

Antes de llegar a la decisión final, José ha sentido que podían tener cosas en común para hacer un camino juntos, pero ella ha insistido en pagar a medias porque todo apuntaba a que le iba a dar calabazas. Le ha confesado que le tiraba para atrás que tuviera tres hijos y que no había sentido las mariposas en el estómago.