Juan es un tipo muy extrovertido, payasete, que se lo pasa muy bien con sus amigos y disfruta del deporte y la alimentación. Es nutricionista y tiene una dieta paleo, algo que no le ha sorprendido a Laura Boado porque ella también hace la misma dieta “fuera los azucares, las harinas, los refinados”. El soltero se siente un poco cuestionado “a cualquier cosa que seas alternativo te llaman talibán, pero decir que el azúcar no es buena, no es ser talibán”.
En el amor, no ha llegado a enamorarse de verdad, pero es que todavía no ha encontrado a la chica perfecta. Busca a una chica inteligente y divertida, que compartan su pasión por el deporte y la alimentación.
Raquel, su cita, tiene 23 años, viene de Madrid y trabaja como modelo y azafata profesional. Para ella el fitness y la nutrición son un estilo de vida y dicen mucho de una persona. Ha llegado muy contenta y no ha dudado en decirle a Matías que estaba estupendamente. Juan ha sentido que tenia un buen cuerpo y ella le ha contado que era de Galicia, pero que trabajaba, estudiaba y entrenaba en Madrid. Lleva desde los 18 años siendo azafata y tiene que perfeccionar los idiomas. A ella, Juan no le ha gustado “no es mi prototipo, pero no es lo peor que han visto mis ojos”.
Mientras esperaban la cena, Raquel ha visto los cinco años que les separaban como una barrera, pero al saber que Juan es nutricionista ha comenzado a tener interés. A ella le encanta el tema del deporte y la nutrición, pero ahora está viajando un montón por su trabajo y lo tiene un poco abandonado. Eso sí, los más de cien mil seguidores de su cita no le ha impresionado para nada “conozco a gente que tiene muchísimos más y eso a mí, me da igual”.
Juan le ha contado que él hacía una alimentación basada en el ayuno intermitente y la dieta paleo, y a ella le ha parecido muy interesante. El joven se ha interesado por el desayuno de su cita y al saber que intercalaba los desayunos con batidos de proteínas le ha dicho que él estaba en contra porque había muchas más proteínas en el jamón serrano de toda la vida.
El soltero también le ha dicho que él no estaba a favor de lavarse con jabón todos los días y que eso no era buena para nuestra piel, algo con lo que Raquel no se ha mostrado muy a favor.
Jugando al Rasca del Amor, les ha tocado responder cuál sería el lugar más raro dónde les gustaría practicar sexo y Juan ha sido muy claro “Yo no estoy pensando todo el día en el sexo porque, además, yo no me masturbo. Yo solo hago sexo real, cuando se da se da y sino hay una sequía, se pasa y punto”.
A Raquel le ha entrado un ataque de risa, pero luego ha sentido que era un tipo con sus propias creencias y con mucha sinceridad. Él le ha dicho que buscaba una relación seria y ella le ha hablado de compartir hasta una cuenta bancaria, pero ella simplemente busca a una persona normal.
Juan ha tenido claro que no quería tener una segunda cita con ella porque no era su prototipo de mujer, pero ella ha cambiado de opinión porque ha sentido que podían tener muchas cosas en común y le ha dicho que sí quería repetir.