Un hombre ha sembrado el pánico en Fregenal de la Sierra, en Badajoz. Este joven, que se encontraba de vacaciones en esta localidad, tras haber roto con su pareja horas antes, se puso muy nervioso y decidió atrincherarse en la vivienda de sus abuelos armado con un cuchillo. Hablamos con el portavoz de la Asociación de la Guardia Civil sobre la actuación de los agentes y la desprotección que sufren en este tipo de sucesos.
'En boca de todos' ha tenido acceso a las impactantes imágenes de este individuo después de que los agentes consiguieran que saliera de la vivienda donde se había atrincherado. En este vídeo se puede ver como el joven, completamente fuera de sí, amenaza con un cuchillo de grandes dimensiones a un guardia civil y le gritaba: "No hay nada que hablar. Iros de mi p*** calle. A mí no me lleváis detenido eh, no me podéis denunciar por nada".
Además, por motivos que aún se desconocen, el joven mientras intimidaba a uno de los agentes, le pedía: "¡Que llames a mi cuñado porque lo voy a matar!" Tras un total de cuatro horas agonizantes para los vecinos de esta tranquila localidad de Badajoz, la guardia civil lograba capturar a este individuo.
Así mismo, el reportero del programa desplazado hasta Fregenal de la Sierra daba más detalles del caso y confirmaba que este joven no tiene diagnosticada ninguna enfermedad mental y que el juez ha decretado prisión provisional para este hombre.
El programa ha conectado con Javier Torrellas, portavoz de la Asociación Unificada de la Guardia Civil, para comentar este grave suceso. "La actuación de los agentes fue impecable porque no hubo ningún tipo de lesión, disparo o agresión directa con el arma blanca que tenía el atacante", empezaba comentando el portavoz.
Tras las palabras de Javier Torrellas, David Aleman, planteaba, si no hubiera sido mejor que los agentes hubieran evitado que el joven armado con un cuchillo entrara de nuevo en la vivienda y amenazara a su familia, el portavoz contestaba: "Este tipo de sucesos son muy complejos y difíciles de gestionar. Una persona con un arma blanca a menos de 6 metros, aunque el agente tenga un arma de fuego, no es paralizante y es muy complicado".
El portavoz de AUGC indicaba, que hay otras opciones para reducir al atacante en este tipo de situaciones, pero que los agentes cada vez tienen más miedo porque hay mucha indefensión jurídica: "Si hay un disparo sin una agresión directa, las consecuencias son serias".
Por último, Javier Torrellas señalaba, que si los agentes hubieran dispuesto de una pistola taser esta situación se hubiera solucionado desde el minuto uno y explicaba que llevan tiempo solicitándoselo al ministerio del Interior.