El actor Daniel Guzmán, condenado por pegar a unos okupas que se encontraban en una vivienda de su propiedad

Daniel Guzmán ha sido condenado a pagar 600 euros por agredir a los okupas que se metieron en su casa. En la denuncia se detalla, que para echarlos, el actor y otros cuatro hombres entraron en su vivienda, golpearon y arrastraron a los okupas hasta que los sacaron de la vivienda.

Los detalles de la desocupación forzosa

En las declaraciones de los okupas a los que ha tenido acceso este programa, uno de ellos relataba: "Todo fue muy rápido, nos pegaron y nos sacaron a rastras preguntando dónde estaban las llaves".

Además, los okupas confesaban que mostraron resistencia, pero que pudieron con ellos: "Entraron por una ventana abierta, nos encerramos en la cocina intentando hacer una barricada con la nevera, pero lograron entrar".

Así mismo, tras ser expulsados a la fuerza de la vivienda, estos okupas presentaron un parte de lesiones con escoriaciones en los codos, dorso del segundo dedo, cuero cabelludo, labio superior derecho y mejilla derecha.

Los okupas desconocían que la vivienda fuera del actor

Respecto al historial de los okupas que estaban en la vivienda de Daniel Guzmán, ellos cuentan que tienen trabajos precarios y que la casa estaba vacía. También, afirmaban, que no sabían que la casa era del actor y mucho menos que "iba a utilizar métodos cercanos a la extrema derecha" para sacarlos de la vivienda.

El abogado Joaquín Moeckel, intervenía en el programa para hablar de esta cuestión y advertía: "Cada día que pasa me estoy dando cuenta que en España tenemos que justificar la actuación cuando una persona está defendiendo su propiedad".

Por otro lado, Sonia Ferrer recalcaba, que lo que más le ha llamado la atención es "lo barato" que sale echar a patadas y dar una paliza a unos okupas: "Le ha salido bastante bien, atentos al mensaje que se envía con esto". A su vez, instaba a las instituciones a poner cartas en el asunto, para que agilicen todos los procesos judiciales y la gente pueda recuperar sus propiedades sin "tener que llamar a cuatro matones".