Mamen no ha dejado de luchar para que se haga justicia desde que hace dos años asesinaron a su hijo. La madre de la víctima lleva sufriendo desde entonces y no levanta cabeza.
El joven murió asesinado una noche de Halloween después de que cinco chicos le pegasen una brutal paliza a escasos metros de su casa. Tras dos años de espera el juicio dará comienzo el próximo 26 de abril y durará tres días. Hay dos personas imputadas, pero el juicio es solo para una de ellas, para el menor de edad, el otro está en fase de instrucción y las otras tres personas irán en calidad de testigo.
La familia cree que hay cinco personas implicadas en la muerte debido a que en las cámaras de seguridad de un vecino se ve cómo cinco personas persiguen a Jesús, la víctima.
Para conocer más a fondo lo sucedido, ‘En boca de todos’ ha entrevistado en directo a Mamen, madre de la víctima, quien visiblemente afectada y entre lágrimas nos cuenta todo sobre la fatídica noche en la que perdió a su hijo.
‘’Confío en que se haga justicia para Jesús y en que funcione como debe de ser, ayudando a las personas inocentes, en este caso a mi hijo’’, comienza Mamen.
Mamen cuenta que su hijo salió de fiesta esa noche y que cuando ella se fue a dormir, al rato escuchó a sus perros ladrar y vio a dos chicos en su calle, entonces salió para ver lo que ocurría y fue en ese momento cuando entendió lo que estaba pasando.
‘’Algo vi a mis pies que me hizo mirar hacia abajo y vi unos botines, un pantalón vaquero, una camiseta y una cabecita, mi hijo estaba tumbado boca abajo con la cabeza hacia al lado y los ojos abiertos’’, explica Mamen.
La madre de la víctima explica que al ver a su hijo así entró corriendo a por el móvil y llamó al 112 aunque recalca que los jóvenes que se encontró ya estaban llamando a emergencias para ayudarle.
Cuenta que los chicos empezaron a seguir las instrucciones del personal de emergencias y comenzaron a hacerle la reanimación mientras ella le cogía la mano a Jesús sin comprender qué es lo que le había ocurrido.
Además, explica que no fue hasta que llegó el médico y le dijo que ‘’no podía hacer nada por su hijo’’, cuando le contaron que había sido víctima de una brutal agresión por el tipo de heridas que tenía.
‘’Mi hijo estaba magullado por todos lados, tenía los nudillos ensangrentados, una brecha bastante contundente en la cabeza y otra en la espalda. Cuando los chicos le dieron la vuelta él tenía bajo su cuerpo una barra extensible totalmente doblada. En la autopsia se revela que tenía una herida de arma blanca en el antebrazo y otra en el corazón’’, desvela Mamen visiblemente afectada.