Hoy se ha conocido que la ex pareja de Jerome Boateng, jugador del Bayern de Munich, ha aparecido muerta en su domicilio que tenía en Berlín. Justo hace una semana el propio jugador comunicaba en sus redes sociales que ponían fin a su relación, la cual estuvo marcada por momentos tormentosos.
Kasia Lenhardt, de 25 años, el pasado 2 de febrero finalizaba su noviazgo con el futbolista tras varias discusiones en donde se acusaron de chantaje e infidelidad. Todo esto se ha puesto ya en mano de la policía para esclarecer lo sucedido, aunque ya las primeras informaciones apuntan a que no se debe ni a terceras personas ni a un asesinato. "Ayer tuvo lugar una operación policial en Berlín-Charlottenburg sobre las 20:30 horas por sospecha de suicidio. Se encontró una persona sin vida en el apartamento. No hay indicios de culpa ajena".
Uno de los ex compañeros de Boateng, Mats Hummels se pronunciaba al respecto. "Probablemente, el odio fuera demasiado para ella. No importa lo que haya pasado verdaderamente, no se puede dar credibilidad a todo. La opinión pública puede ser cruel. Y la verdad, a menudo, es otra. Estoy absolutamente conmocionado y triste. Esto es simplemente desgarrador. Qué desesperada debe haber estado".
El jugador se encontraba concentrado con el equipo para disputar la final del Mundial de Clubes que juega contra el Tigres, pero su entrenador ha confirmado que no estará para jugar. "Las noticias que nos llegaron desde Berlín nos han afectado mucho. Jerome me pidió permiso de volver a Berlín. No estará a nuestra disposición hasta nuevo aviso".
La relación duró unos 15 meses, pero los testimonios que aporta el jugador dicen que en algunos momentos fue algo tormentosa. Justo antes de que finalizaran su noviazgo, la modelo estrelló su coche y dio positivo en alcohol en los análisis de sangre posteriores que se le hicieron al incidente. "Tengo que asumir la responsabilidad y actuar cuidando los intereses de mi familia, disculpándome con todos aquellos que he lastimado, disculpándome con todos aquellos que he lastimado,especialmente con mi exnovia Rebecca y nuestros hijos", dijo el jugador del Bayern. "Kasia me amenazaba con destruir mi carrera y perder a mis hijos. Dijo que me acusaría de golpearla"
Kasia no llegó a hablar bien de su pareja en alguna ocasión como apuntaban la prensa inglesa y le llegó a catalogar como "demonio". "Hablaré, tengo que serenarme primero. Por favor, dadme tiempo", decía ella tras romper con su novio.