La locura se trasladó a las calles de Buenos Aires para celebrar el tercer Mundial de Argentina. Más de cuatro millones de aficionados abarrotaron las calles. El entusiasmo se contagió de los fans y se trasladó a los jugadores. Uno de los más activos fue el Papu Gómez.
El jugador del Sevilla en un momento del recorrido comenzó a tirar billetes desde el autobús a los aficionados. Uno de ellos pilló en video el momento en el que los tiraba y al poco se hizo viral. Se vio que había varios billetes de 100 pesos, pero se desconoce si es dinero real o falso.
Buenos Aires vivió una auténtica locura en el desfile triunfal de la selección argentina de fútbol por la conquista de la Copa del Mundo, una celebración que reunió a cerca de cinco millones de aficionados y que no pudo concluir tras un incidente durante el paso del autobús de los jugadores y cuerpo técnico.
Una multitud se agolpó por las calles de la capital argentina y pobló la Plaza del Obelisco donde deberían haber llegado los campeones del mundo tras su recorrido desde su lugar de descanso. Sin embargo, no pudieron llegar al emblemático lugar después de que dos hinchas saltasen desde un puente de forma inesperada al interior del vehículo.
Según los vídeos, los jugadores intentaron disuadir de su intento a estas dos personas, una de las cuales aterrizó en el interior del autobús, mientras que el segundo no tuvo tanta suerte, y tras caer en la parte trasera, terminó cayendo al asfalto.
La 'Albiceleste', acompañada por su preciado trofeo de campeón, había aterrizado en la madrugada de este martes, y tras descansar en las instalaciones de la AFA, en las afueras de Buenos Aires, partió hacia la capital a primera hora de la tarde.
Sin embargo, debido a la enorme aglomeración de gente, el autobús sólo pudo circular muy lentamente, tardando más de tres horas en hacer 12 kilómetros, y finalmente las autoridades decidieron interrumpir el desfile, desviarles para trasladarles a helicópteros y llevarlos al punto de partida.
La policía informó de que el helicóptero en el que viajaban el capitán Leo Messi, el seleccionador nacional Lionel Scaloni y el trofeo de la Copa del Mundo sobrevoló también el Obelisco para recompensar a los miles de aficionados que les esperaban desde primera hora de la mañana pese a las altas temperaturas que registró la capital.