Fernando Alonso y Aston Martin se han convertido en una piña, en una familia. El piloto asturiano consiguió su segundo podio consecutivo, y su ambición por ganar es tal, que antes de la carrera se hizo una curiosa apuesta con sus mecánicos. Una apuesta que el bicampeón del mundo acabó ganando, y eso que lo tenía muy difícil.
El piloto de Aston Martin compartió en una entrevista tras la carrera en Arabia Saudita la apuesta que hizo antes de la carrera con sus mecánicos. Fernando Alonso salía en segunda posición en la carrera, por detrás del Red Bull de Checo Pérez, que por el momento ha demostrado estar en otra liga junto a su compañero Max Verstappen. El ex de Alpine se apostó que pasaría primero por la primera curva del circuito, es decir, que le ganaría en velocidad y reflejos al piloto mexicano, y así fue.
Fernando Alonso le ganó al hombre de Red Bull en la salida y durante las primeras vueltas, Aston Martin pudo presumir de liderar un gran premio. El asturiano estaba convencido de ello y se apostó pagarle una cerveza a todo el equipo en la próxima carrera - Australia - ya que tanto en Baréin como en Arabia Saudita está prohibido el consumo de alcohol.
"Tengo que comprar algunas cervezas en Australia", dijo Fernando Alonso a su ingeniero por la radio nada más cruzar la meta y es que el asturiano es uno de esos pilotos que puede hacer varias cosas a la vez mientras conduce. De hecho, se enteró de que Carlos Sainz había entrado a boxes mirando las pantallas del circuito a más de 300 kilómetros por hora. Sin duda, el bicampeón del mundo está hecho de otra pasta.