Lewis Hamilton ha aprovechado la semana libre entre el Gran Premio de Mónaco y la carrera en Bakú para disfrutar con su familia y amigos en Londres. Además, aprovechó para realizar una actividad común para la mayoría, pero que puede convertirse en una odisea para figuras públicas de su calibre: viajar en metro.
El heptacampeón del mundo ha viajado el fin de semana a la capital inglesa para pasar tiempo con su familia y amigos. Entre las actividades que ha realizado, están caminar por las calles londinenses y viajar en metro, algo que no hacía desde hace años. Hamilton ha asegurado sentirse revitalizado tras la visita a su casa.
“He pasado un fin de semana maravilloso con familia y amigos. Paseé por Londres y me monté en metro la noche pasada, que es algo que llevaba años sin hacer. Me siento renovado de cara a esta semana”, comentó el piloto de Mercedes a través de sus redes sociales, en las que también compartió un vídeo de sus andanzas.
Entre las estaciones que visitó se encuentran High Street Kensington y Notting Hill. Eso sí, su aventura por el metro de Londres tuvo sus condiciones: el piloto británico se vio obligado a viajar a las 3 de la mañana para evitar la muchedumbre. Aun así, coincidió con algunos aficionados con los que se paró a firmar autógrafos y a hacerse fotos.