Desastre de mercado para el Barça: cuatro jugadores regalados a equipos Champions e incapaces de fichar a Depay y Éric García

El Barça ha cerrado este lunes un mercado de fichajes aciago en lo deportivo y en lo económico, donde Josep María Bartomeu ha vuelto a ser el gran señalado. Jugadores regalados a equipos rivales, llegadas de futbolistas de poca envergadura y para colmo, la incapacidad de traer a Depay , las dos únicas peticiones de Koeman y la afición cuyas operaciones parecían, a priori, asequibles.

Bartomeu empezó el mercado de fichajes con la difícil tarea de cargarse a los culpables del fatídico 2-8 ante el Bayern de Munich para iniciar una renovación de la plantilla. Una ardua empresa que le ha llevado a prácticamente regalar a jugadores muy 'top' a equipos que son, tanto rivales en Liga, como en Champions.

El Barça ha mejorado las plantillas de sus rivales directos en Liga y Champions

Rafinha (PSG), Arturo Vidal (Inter), Luis Suárez (Atlético) y Rakitic (Sevilla), han abandonado Can Barça este verano por un precio total que no llega ni a los seis millones de euros. Una cantidad irrisoria si tenemos en cuenta que rivales en Liga y Champions han salido reforzados con estas operaciones. La excusa del Barça, el haber salido ganando al reducir la masa salarial hasta en 70 millones de euros.

Arthur (70 millones) y Nelson Semedo (35 millones) son las bajas más notables, en lo económico, de un Barça que no ha sabido sacar rendimiento a ese dinero. Probablemente por la brutal crisis en la que se encuentra sumida el club, que ha anunciado unas pérdidas de más de 90 millones tras el paso del coronavirus.

Sea como fuere, Pjanic (60 millones), Trincao (31 millones) y Sergiño Dest (21 millones) son las únicas llegadas a Can Barça. Jugadores, que a excepción del holandés, no es que ilusionen mucho a la afición azulgrana. Además de la vuelta de Pedri, quien no contará con demasiados minutos.

Depay y Éric García se han quedado finalmente en sus clubes

Si hay algo que ha molestado a técnico y afición es la no llegada de Depay y Éric García. 50 millones era el total de ambas operaciones, una cantidad que el Barça no tenía y que el presidente del Lyon se ha encargado de hacer público. Pese a que había acuerdos personales con ambos jugadores, la directiva azulgrana no ha conseguido traerlos al Barça.

Con el que si se ha quedado ha sido con un Dembelé con quien no cuenta Koeman y que podría haber mejorado al situación económica del club, además de haber permitido la llegada del delantero holandés del Lyon.

Y todo ello, en un verano donde el FC Barcelona ha estado a punto de perder a su mejor jugador de todos los tiempos, Leo Messi. Pero de momento, ni la moción de censura ha podido con un Bartomeu que se aferra al cargo en los últimos meses de su mandato. Una presidencia que será recordada por lo malo, y no por lo bueno.