La actividad no para en las oficinas del Barça. Tras el aviso de salida para Luis Suárez, Arturo Vidal, Rakitic y Umtiti, y el cara a cara con Sergio Busquets para advertirle de que gozará de menos protagonismo, ahora el turno le toca a Gerard Piqué.
Ronald Koeman cuenta con Piqué como liderar de la defensa en este nuevo proyecto pero tendrá que rebajarse su ficha. Es un caso similar al de Busquets, Jordi Alba o Sergi Roberto. Jugadores con los que se cuenta pero con una ficha económica muy alta.
En esta momento económico, marcado por la crisis del coronavirus, la directiva del Barcelona pedirá a varios ‘pesos pesados’ del vestuario revisar a la baja sus nóminas para poder cuadrar las cuentas y afrontar el proyecto que quiere Koeman.
Piqué tiene contrato como culé hasta junio del año 2022. El central fue el único que se ofreció a dar un paso a un lado tras la humillación en Champions ante el Bayern. Pese a su gesto, el Barça cuenta con él aunque deberá hacer un esfuerzo económico.
Las formas con las que se afronta la continuidad de estos jugadores criados en la cantera dista mucho de las utilizadas con Luis Suárez donde una llamada de no más de un minuto le cerró las puertas del club.
El Barça ha ordenado tener “tacto” con jugadores de la casa, aunque dejándoles claro que su rol dentro del equipo en el nuevo proyecto de Koeman ha cambiado por completo. Veremos como afrontar su nuevo futuro como culés o deciden buscar una salida.