Leo Messi está cabreado como se pudo ver a su llegada a Barcelona tras 15 horas de vuelo desde Argentina. El delantero explotó tras una pregunta sobre el entorno de Griezmann y le pareció “una locura” que inspectores de Hacienda entraran a su avión nada más aterrizar. Lejos de tranquilizarse su situación en el Barcelona con la marcha de Bartomeu, Messi sigue sin estar cómodo en la Ciudad Condal. Y el Manchester City volverá a intentar su fichaje este mes de enero con una nueva oferta.
La crisis económica del Barcelona sigue siendo muy grave y la gestora del club no ha llegado a un acuerdo con el vestuario para rebajar los salarios con lo que el equipo culé podría entrar en concurso de acreedores. El nuevo presidente tendrá que negociar con los jugadores, si deciden aplazar sus nóminas, y se encontrará con una situación económica muy grave.
Eso es lo que quiere aprovechar el Manchester City. El conjunto inglés ya estuvo cerca de fichar y lo volverá a intentar en el mes de enero. El City, según The Sun, le hará una oferta de unos 50 millones de euros al Barça por el argentino para que Messi juegue con Pep Guardiola desde el próximo mercado de fichajes. Es difícil que el Barcelona pueda aceptar una propuesta para vender a Messi, y más en enero, pero aliviaría sus problemas económicos.
Y lo que no ayuda es el cabreo que tiene Leo Messi en Barcelona. Nunca antes se había visto al argentino así de cabreado en el aeropuerto y estalló contra una pregunta sobre el entorno de Griezmann y señaló que también había sido objeto de una inspección de Hacienda tras 15 horas de vuelo. Las circunstancias no son las mejores y el Manchester City quiere aprovechar esta serie de circunstancias para volver a demostrar a Messi que le quiere en su plantilla.
Además, si Messi fichara por el Manchester City podría jugar la Champions y Pep Guardiola podría contar con él desde el principio en todas las competiciones. Antes no se permitía que un jugador jugara con dos equipos distintos en la misma temporada en la Champions, pero esa regla cambió y ya no sería así.
La opción de una posible salida de Messi es muy improbable, tanto porque el Barcelona tendría que aceptar la oferta del City como porque el argentino saldría del club de su vida en el mercado de fichajes de invierno, a mitad de temporada. Messi sigue pensando que es el problema de todo en Barcelona y su cabreo al llegar de Argentina ha vuelto a evidenciar que sigue sin haberse recuperado del mal momento que pasó en verano con el burofax.