La obsesión de Jesé Rodríguez por el oro: sus inversiones en joyas alcanzan varios millones de euros

Jesé Rodríguez rompió un contrato que le ató a Francia durante cinco años. Salió del Real Madrid para triunfar en el Paris Saint Germain pero su rendimiento se transformó en múltiples cesiones. El canario tenía en su sueldo anual con los parisinos más de cinco millones de euros limpios. A esto hay que sumarle sus contratos publicitarios e inversiones personales.

Ahora ha cambiado totalmente de vida en Las Palmas. Tras reconciliarse con Aurah Ruiz, madre de su hijo Nyan, ha encontrado acomodo en la Liga en este mercado de invierno. Tras rechazar varias ofertas superiores, Jesé se ha unido a la Unión Deportiva de las manos de Pepe Mel.

Este último ciclo de Jesé ha estado marcado más por los asuntos extradeportivos que por sus goles. El delantero mantiene conflictos con Melody Santana –la madre de sus dos primeros hijos- y con Janira Barm –la madre de sus últimos dos hijos-. Recordamos que Jesé tiene cinco pequeños con cuatro mujeres diferentes.

Jesé quiere aprovechar esta ocasión que le brinda el fútbol para demostrar todo su potencial. Eso sí, tampoco quiere dejar de un lado su faceta musical. El ‘Bichito’ acaba de sacar nuevo single y su videoclip con Aurah Ruiz promete emociones fuertes.

A través de sus redes sociales como músico vemos descubierta otra de sus grandes pasiones: el oro. Jesé acumula decenas de joyas de altísimo valor que ha ido coleccionando durante estos años. Relojes Rolex con diamantes, a pulseras de grosor oro adornan su vestuario habitual.

La pasión de Jesé por el oro y las joyas es tal que en su poder acumula varios millones de euros. El metal dorado es una de las inversiones más seguras y cotizadas sobre todo en tiempos de incertidumbre económica. Jesé lo sabe y ahí acumula varios de los millones que ganó en Francia.

Sin duda, Jesé es otro. Ahora se centra en inversiones con sus ahorros y en cuidar de su familia junto a Aurah Ruiz. El canario se ha transformado desde su regreso a España.