El Ceuta, equipo del grupo I de la Primera RFEF va a recurrir la tarjeta amarilla que recibió su jugador Rodri por celebrar un gol. El delantero se lo dedicó a su padre y el colegiado entendió que el gesto que hacía era para provocar a los espectadores por lo que le sacó la cartulina.
La situación se produjo en el estadio Nuevo Arcángel, cuando el colegiado madrileño Pedro Eugenio Muñoz Piedra enseñó la tarjeta amarilla a Rodri en el minuto 34 por festejar el gol llevándose las manos a la cara, según han informado a EFE fuentes del club ceutí.
El colegiado reflejó en el acta que Rodri había sido amonestado por, “una vez celebrado un gol anotado por él mismo, regresar al lugar que éste ya había sido celebrado, dirigiéndose a los aficionados del equipo contrario y realizándoles gestos provocadores, consistentes en llevarse las manos a la cara”.
Al término del encuentro, Rodri expresó en las redes sociales su malestar por la cartulina y aclaró que se puso las manos en la cara para celebrar el gol para dedicárselo a su padre, "porque tiene barba", y que no tiene "nada que ver con lo que recoge el acta arbitral ni con una provocación: esto no es fútbol”, sentencia.
“He celebrado el gol de hoy poniéndome las manos en la cara para dedicárselo a mi PADRE porque tiene BARBA. Nada que ver con lo que recoge el acta arbitral ni con una provocación. Esto NO es fútbol”, decía el jugador del Ceuta en su Twitter.
La Ciudad Autónoma de Ceuta ha mostrado este lunes su consternación por el fallecimiento del jugador Darío Duzmán, perteneciente al AD Ceuta C de la Regional Preferente, que se produjo tras encontrarse mal a la finalización de su partido de liga.
Diferentes estamentos, clubes y asociaciones han expresado sus condolencias a la familia y se han mostrado sorprendidos por la repentina muerte del jugador, de 33 años, que era militar de profesión y que había pertenecido a diferentes equipos locales tanto de fútbol como de fútbol sala.