El extremo izquierdo belga del Atlético de Madrid, Yanick Carrasco, ha pasado de ser un jugador importante para el Cholo, a jugar solo las segundas partes y salir de revulsivo a los encuentros.
El jugador ha pasado a un segundo plano dentro de la plantilla del club, pero esto tiene varios motivos. El principal es el bajo rendimiento y la falta de actitud que está mostrando en los minutos que sale al terreno de juego. En los últimos encuentros, la actitud con la que ha salido al césped desde el banquillo ha sido muy criticada por los aficionados rojiblancos.
Esta situación ya ocurrió con Yanick hace unos años, cuando abandonó el club rojiblanco para poner rumbo a la liga China. Finalmente, regresó a las órdenes de Simeone, por petición propia del entrenador, y ha sido importante en estos últimos años, especialmente, en la temporada 2020/2021, donde las actuaciones de Carrasco fueron fundamentales para conseguir el campeonato de Liga.
A su falta de actitud se suma que, en el pasado mercado de invierno, el Barça mostró interés por el jugador belga y quiso incluirlo en el traspaso por Memphis Depay, a lo que el Atlético se negó, ya que, si no, debería salir al mercado para encontrar un sustituto por lo que restaba de temporada.
Por esto, el club rojiblanco no cuenta con él ya para la próxima temporada y, desde que pidió irse al Barça, Simeone no le ha puesto de titular dejándole como revulsivo. En las oficinas rojiblancas molestó muchísimo la actitud de su agente, Pini Zahavi, que presionó y tensó la cuerda hasta límites que acabarán con la marcha del belga del club.
El Barça consiguió sacar al final una opción de compra por Carrasco de unos 15 millones de euros a partir del 30 de junio. Carrasco tiene el interés de varios clubs de la Premier, pero su única opción es vestir de blaugrana y eso, sumado a que su contrato con el Atleti termina en 2024, podría abaratar la operación.