Marcos Llorente fue un jugador indispensable para el Atlético de Madrid en la temporada 2020/2021 en la persecución de la decimo primera liga del club colchonero. Una temporada donde congenió a la perfección con el lateral británico, Trippier, con quien dio muchas alegrías en el ataque rojiblanco por la banda derecha.
En esa temporada el centrocampista madrileño consiguió marcar 12 goles y dar 11 asistencias. Tras la salida de Kieran Trippier del Metropolitano, Marcos no había conseguido encontrar un aliado que le ayudara a explotar su carrera en profundidad para encarar de cara a la portería, pero la llegada del internacional argentino, Nahuel Molina, parece que lo ha cambiado todo y empieza a encontrar en él un nuevo socio.
La temporada pasada, 2021/2022, fue un año donde Llorente pasó desapercibido por el Metropolitano y, a finales del 2022, sufrió una lesión muscular en el muslo, que le mantuvo alejado del terreno de juego durante un mes. El bajo nivel físico, que es la cualidad que más le caracteriza a Marcos como jugador, junto a la delicada situación que atraviesa el club, hacen que salten las alarmas de los hinchas rojiblancos de cara al futuro.
El centrocampista no ha dudado en mandar un mensaje a los seguidores atléticos, mostrando su compromiso con el club y donde asegura que "a él también le duele la situación y harán todo lo posible para que se sientan orgullosos".
La mejor noticia para el Atlético de Madrid es el regreso del instinto goleador de Llorente de cara a portería, la vuelta de la mejor versión del 14 rojiblanco es el mejor fichaje de los colchoneros en este mercado de invierno. Su capacidad de desmarcarse al espacio, llegar a línea de fondo y realizar centros verticales al área suponen siempre una ocasión de peligro en la portería contraria para los de Simeone, además de su portento físico, que le permite correr y cubrir espacios incansable durante los 90 minutos.
Desde que ha comenzado el año, Llorente ha hecho 2 goles y 1 asistencia y ha sido el mejor del equipo en los últimos encuentros ligueros ante Barcelona y Almería y en la eliminatoria ante el Levante, donde marcó su segundo gol y dio una asistencia, que permitieron que el Atleti se clasificara para los cuartos de final de la Copa del Rey. El peligro en el ataque rojiblanco depende de que Marcos esté cerca del área contraria. Tras el partido en el Ciudat de Valencia, el jugador ha mandado otro mensaje a la afición colchonera, esta vez destacando la unión que debe haber entre todas las partes del club para enfrentar este final de temporada: "Solidez, unión, compromiso..."