El defensa inglés del Manchester City, Kyle Walker, protagonizó uno de los momentos más graciosos del encuentro entre su equipo y los Leeds en el Elland Road. Una conocida plataforma de vídeo estaba retransmitiendo el partido de la Premier y decidió que era buena idea colocar una cámara encima del banquillo visitante, para que los espectadores tuvieran otra perspectiva del juego.
Kyle Walker parecía no entender qué hacía una cámara ahí, que justo estaba chocando con su cabeza y decidió quitarla para apoyarla en el suelo. En el descanso, el técnico, volvió a recolocar la cámara para no perder esa visión del terreno de juego y enfadado le dijo a los hinchas que habían acudido al encuentro: "Tengo miedo de que ahora hayamos perdido el ángulo". Cuando los jugadores del City volvieron al banquillo, tras el parón de 15 minutos, Kyle volvió a ver la cámara colocada y en un principio se enfadó, pero luego comenzó a bromear con ella, haciendo que le daba un poco de la bebida caliente que estaba tomando, poniendo su cara en primer plano y riéndose con sus compañeros de la situación surrealista que estaba viviendo.
Fue un encuentro donde se retomaba la Premier después del parón por el Mundial de Qatar, donde algunos de los futbolistas retomaban el contacto con el terreno de juego después de un mes y medio sin competir. El City consiguió dominar el partido en todo momento con un gran partido de todos sus jugadores, que acabó con victoria por 1-3 de los de Guardiola. Con gol de Rodrigo antes del descanso para abrir el marcador y un doblete de Haaland, que le permite llegar a los 20 goles en lo que va de temporada y sigue completando actuaciones que dejan asombrados a todos. Los Leeds pudieron recortar distancias con un tanto de Strujik, pero no les sirvió para conseguir hacerse con el partido.
De Bruyne completó un partido memorable y junto con las asistencias de Grealish consiguieron mantener el partido dominado, pero sus actuaciones quedaron eclipsadas por el noruego, que parece que no le ha afectado estar casi dos meses fuera de competición.