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Los mejores mates de la NBA: destrozando el aro

  • Julius Erving protagonizó el primer mate desde la línea del tiro libre

  • Michael Jordan hizo grandes mates tanto en concursos como en los partidos

  • Aaron Gordon y Zach LaVine rivalizaron en uno de los mejores concursos de mates de la historia

Si nos ponemos a pensar en la parte más espectacular del baloncesto, es posible que el público piense, directamente, en los mates. Para otros serán más asombrosos los movimientos a canasta o algunos tiros inimaginables, pero lo cierto es que el mate, la acción de "hundir" el balón en el aro con fuerza o elegancia, es una acción que ha ido mejorando a lo largo de la historia al tiempo que se iban esculpiendo cuerpos de jugadores más físicos.

Pero ya que vamos a hablar de los mejores mates de la historia de la NBA vamos a hacer dos clasificaciones distintas: la primera, referida a los mates en juego, es decir, durante un partido que los hay espectaculares (y mucho); y, después, los mates de concursos que, en los últimos años, han subido el nivel que alcanzaron las leyendas en los años 80 y 90. A estas alturas del siglo XXI asumimos que nuestras elecciones van a ser totalmente discutibles respecto a gustos, jugadores, plasticidad, fuerza, decisión o importancia, pero estos 10 mates merecen estar entre los mejores.

En 1976, el "Doctor J" Julius Erving, jugando para los New York Nets de la ABA (antes de la actual NBA), disputaba la primera competición que se hacía de este tipo. Erving, que ya era una conocida estrella del baloncesto, buscaba una manera espectacular de llevarse el concurso y relanzar una competición que no pasaba por su mejor momento. Luchaba contra el base de los Nuggets, David Thompson, y Julius Erving tomó carrerilla desde el tiro libre de la canasta contraria con su pelo "afro" y el icónico balón tricolor de la ABA: el talonamiento lo hizo desde la línea de tiro libre y logró alcanzar el aro desde los 4,40 metros de distancia logrando el mate y la locura. Michael Jordan lo repitió años después y más jugadores lo hicieron, pero Julius Erving fue el primero.

Michael Jordan, una vez más, está entre los hitos de cualquier clasificación de la NBA. Su concurso de 1985 fue eclipsado por Dominique Wilkins y sus molinillos, a pesar de que Jordan consiguió el mate al saltar desde la línea como había hecho el "Dr J" en 1976. Así que como la palabra fracaso no está en su vocabulario, en el de 1987 consiguió inmortalizar su 'tomahawk', un mate lateral en el que la cabeza prácticamente superaba la altura del aro y casi ponía su cuerpo en horizontal. Como siempre espectacular e inolvidable.

Hubo una vez un jovenzuelo que jugaba con su primo en Toronto Raptors y consiguió que, con su primer mate, el público proclamase su victoria. Los comentaristas se volvieron locos con Vince Carter en el concurso del año 2000 de San Francisco, buscaban ya al jugador que ocupase el segundo puesto porque el primero ya quedaba más que claro. "Vinsanity" fue hacia el aro y consiguió un 360º con un molinillo que fue calificado como el mejor de la historia, y es posible que en aquel momento lo fuera. Y podríamos decir más: su tercer mate de aquel concurso, ayudado por su primo, en el que pasó el balón entre las piernas y machacó, también podría estar en cualquier top.

Quizás ese de San Francisco 2000 pudo ser el mejor concurso de mates de la historia, incluso teniendo en cuenta el de Chicago 1988, pero todo cambió en 2016 cuando Aaron Gordon y Zach LaVine se enfrentaron en Toronto. Aaron Gordon mereció ganar tras los dos primeros mates con, quizás, el mejor ejecutado de la historia en colaboración con la mascota de Orlando, que mantuvo el balón en lo alto de la cabeza. Aaron Gordon voló por encima de la mascota, cogió el balón, se lo pasó por debajo de las piernas como si se sentase en el aire, con la cabeza a la altura del aro y machacó con la mano izquierda. El comentarista y exjugador Kenny Smith mandaba a todos a casa, pero faltaba Zach LaVine.

El jugador de los Bulls (entonces en los Wolves) cogió carrerilla emulando a "Dr J" y Michael Jordan y saltó desde la línea de personal. Pero, a diferencia de ellos, se pasó el balón entre las piernas al tiempo que sumaba un molinillo con su brazo derecho. Técnica, potencia, velocidad, flexibilidad y campeonato. Un título que, seguramente ganó en ese mate porque Aaron Gordon mereció ganarlo en los mates anteriores, pero los jueces puntuaron desigualmente el principio de la competición. El vuelo de Zach LaVine y su enfrentamiento contra Gordon quedará para la historia como dos de los mejores mates y, para muchos, el mejor concurso de la historia de los "All Stars".

Los mejores mates de la NBA

Pero es que, además de los mates de concurso, tenemos que mencionar los más espectaculares acaecidos en un partido y el primero que nos viene a la mente es aquel de 1989 cuando en un contraataque entre Kevin Johnson y Tom Chambers, de los Phoenix Suns, acabó en un impresionante mate del alero volando por encima de Mark Jackson, por entonces base en los New York Knicks. Ver ese mate en cámara lenta pone los pelos de punta, primero porque la rodilla de Chambers se encaja en el cuello del base y, segundo, porque la cabeza del de Phoenix roza el aro antes de hundir el balón en la canasta. Muchos dirán que así es como tiene que acabar un contraataque y no les vamos a llevar la contraria.

Otro elegido es un mate con mucha historia, ya que viene marcada porque un base de 1,91 como era Baron Davis (Golden State Warriors) aprovechó un bloqueo para ir a canasta contra un ruso como Andrei Kirilenko (Utah Jazz) que superaba los 2,06 y era considerado el mejor taponador de la NBA. El pequeño base no se lo pensó dos veces y 'posterizó' a Kirilenko en un mate lleno de potencia, arrojo, fuerza y tensión competitiva que hizo que su adrenalina se disparase, así como la celebración del público de San Francisco que en esa época estaba sacando a su equipo del aburrimiento.

Y si hubo alguien que sacó a su público del aburrimiento durante años, ese fue Lebron James al de los Cleveland Cavaliers. Pero aquel cuarto partido de los playoffs de 2008 que enfrentaba a los Cavs contra los Celtics dejó un mate para la historia. Lebron fue con furia hacia canasta y Kevin Garnett se llevó una foto que no olvidará el resto de su vida, ya que James saltó lateralmente con la mayor violencia física que pudo para sellar la victoria. Desgraciadamente para Lebron, aquel año Kevin Garnett rio más, ya que acabó llevándose el anillo de campeón de la NBA, pero el mate no lo olvidará.

Año 1991, playoffs y otra vez Michael Jordan en el Madison Square Garden. Aún no habían llegado al descanso y los Bulls iban 4 puntos abajo. Los Knicks plantean una pequeña presión para intentar robar y Kiki Vandewege intenta junto a Mark Jackson un 2 contra 1 contra Jordan. Parece que logran encerrarlo en la banda, pero encuentra un hueco para ir a canasta, Charles Oakley acude a la ayuda para cerrar el camino y Jordan da marcha atrás, pero cuando todos creen que vuelve a la banda, se saca un cambio de dirección y de ritmo de la manga, deja a todos rotos y encara el aro donde aparece Patrick Ewing. Dio igual, Michael Jordan sacó su escalera y subió por encima de Ewing para hacer uno de los mates más recordados del Madison en otra actuación memorable del más grande de todos los tiempos.

Y como un regalo de reyes, el 5 de enero de 1983 se produjo uno de esos hechos icónicos en la historia del baloncesto cuando, tras un robo de balón, el "Dr. J" avanzó a canasta con la única oposición de Michael Cooper (Lakers). Era un partido de liga regular, pero ambos equipos de distintas conferencias se disputaban la hegemonía de la NBA. Los Sixers vivían su época dorada con Erving al mando. Michael Cooper era considerado uno de los mejores defensores de la NBA, así que ese contraataque podía acabar en robo de balón, pero es que robarle el balón a Erving, que tenía unas manos gigantes, no era tan fácil. Julius Erving controló el balón y lo agarró con una sola mano sin que a Cooper le diese tiempo a realizar algún engaño y, desde muy lejos, empezó los pasos para encarar el aro. Subió el balón casi hasta los focos y, sin nada más, machacó el aro debajo del cual Cooper solo pudo encogerse para no recibir ningún golpe. Para muchos el mejor mate de la historia de la NBA.

Sin duda ha habido muchos más mates memorables de jugadores muy atléticos como Josh Smith (Hawks), Richarson (Warriors), Bryant (Lakers)... La NBA está repleta de jugadas espectaculares, pero no queremos acabar sin recordar el de Vince Carter jugando con la selección de Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000 cuando pasó, literalmente, por encima de Weis (Francia) de 2,14m. Muchos le llaman el "mate de la muerte": hay que verlo para opinar.