Hace unos días se producía el primer aniversario de la muerte de Kobe Bryant, su hija y las otras siete personas que iban en el helicóptero. Este accidente conmocionó al mundo y desde ese mismo momento se comenzó una exhaustiva investigación para saber qué pasó realmente ese fatídico 26 de enero.
Tanto la viuda de Bryant como el resto de familiares denunciaron a unos policías por tomar fotografías del lugar del accidente. Pero además de esto había ya unas pesquisas para saber por qué la aeronave voló cuando había niebla o ciertos movimientos que hizo durante el vuelo.
Ahora se han desvelado parte de estas incógnitas. La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) ha publicado el informe final de este accidente. En él se recoge que el piloto, Ara Zobayan, durante el vuelo se desorientó al no interpretar bien las indicaciones del trayecto y las del clima. También se apunta a que este incumplió las las normas de vuelo al ingresar en las nubes durante el mismo.
Este tipo de indicios les ha llevado a hacer conclusiones acerca del piloto. Este estaba cualificado y sabía perfectamente cuáles son las normas a la hora de volar por lo que la toma de decisiones que hizo "demostraron ser inconsistentes". A pesar de que estaba viendo que "las condiciones se estaban deteriorando en la ruta" no tomó una alternativa.
"La velocidad excesiva al entrar en la nube, el rápido ritmo de descenso y el giro a la izquierda eran incompatibles con su entrenamiento. A medida que el helicóptero continuaba ascendiendo hacia la nube, la pérdida de referencias visuales le habría obligado a hacer la transición a los instrumentos de vuelo para mantener el conocimiento de la actitud y la trayectoria del helicóptero", se recogía en el informe de la NTSB.
En este se apunta que percibió mal las señalas y en vez de ascender como pretendía se produjo un descenso brusco hasta estrellarse. "Cuando un piloto percibe erróneamente la altitud piloto percibe erróneamente la altitudy la aceleración se conoce como ilusión somatográfica y puede causar desorientación espacial. Cuando se vuela un avión y hay una falta de referencias visuales externas, el oído interno puede darnos una falsa sensación de orientación porque el oído interno no puede distinguir entre aceleraciones e inclinación.
El piloto no estaba haciendo referencia a los instrumentos o tenía dificultades para interpretarlos o creerlos debido a las convincentes ilusiones y no recuperó con éxito el helicóptero".
En este informe también se han recogido ciertas recomendaciones para que accidentes de este tipo no se vuelvan a producir. Una de ellas es la presencia de la alarma de presunción a las aeronaves. "El equipo de seguridad de helicópteros de Estados Unidos ha establecido metas para promover un uso más amplio de la tecnología de simulación de desorientación espacial. El mayor uso de esta tecnología para complementar el entrenamiento de los pilotos muestra el potencial para ayudar a los pilotos a desarrollar habilidades para detectar y recuperarse de ilusiones que podrían conducir a la desorientación espacial", concluía la NTSB.