La semana pasada, el programa publicó en exclusiva el contenido escrito de la denuncia que Ángela le puso a Josep María Mainat por presuntas coacciones: “Nunca me ha maltratado físicamente, pero sí me insultaba y me llamaba gamberra o quinqui”, eran las palabras de la mujer a la que, en los últimos días, hemos visto salir y entrar con varias pelucas de la casa del productor, a pesar de tener una orden judicial de desahucio.
Ahora, ‘Cuatro al día’ ha tenido acceso a dos grabaciones distintas en las que Ángela es interrogada. La primera, en la que se la ve llorando y con una fuerte ansiedad, es de poco después de que fuera acusada de intento de asesinato por su marido, quien asegura que quiso matarle de forma consciente con una sobredosis de insulina.
En el vídeo, se ve y se escucha a Ángela prometiéndole a su señoría que no se va a fugar de España, a pesar de tamaña acusación: “Yo no he hecho nada y no sé cómo demostrarlo. No me voy a ir del país, no tengo dinero para hacerlo, pero es que tampoco lo haría. Si quiere, le doy mi pasaporte. No voy a ir a ninguna parte, me dan ataques de ansiedad y no sé si rendirme o luchar”, decía, notablemente alterada. Sus palabras debieron ser efectivas porque el juez no la envió a prisión preventiva por riesgo de fuga, sino que le hizo firmar en una comisaría, frente a los Mossos, en intervalos de 15 días.
En otra de las grabaciones, que se hizo después de que Ángela, a la que hemos visto salir de su casa con bandejas de bollos para la prensa, denunciara a su exmarido por presuntos malos tratos, dice lo siguiente sobre su vida matrimonial: "Tengo terror a Josep María Mainat. Mi vida se ha convertido en una pesadilla, mi vida está destrozada", decía, y parece que una no hay atisbos de que se vaya a arreglar.