'Cuatro al día' ha denunciado el caso de Cristina, una joven a la que le apareció un linfoma después de hacerse un aumento de pecho y ponerse unas prótesis que le había recomendado su propio médico. Así lo ha contado ella misma en el programa:
"Yo quería operarme porque tenía un defecto físico, pero no queríamos que fuera nada antinatural. Por eso, mi médico me recomendó unas prótesis que eran las mejores del mundo, y no me dijo que había 500 mujeres en el mundo que habían muerto por su implantación".
Poco después de la operación, Cristina empezó a encontrarse mal y a tener molestias y, finalmente, le detectaron un linfoma en el pecho que había que operar y extraer inmediatamente.
Así lo hizo, pero sólo pudieron quitarle una prótesis, porque el pecho estaba, como le dijeron los médicos, "lleno de zonas negras y marrones", que ella entiende que eran parte del cáncer y de su propio pecho, necrosado.
A raíz de la aparición del linfoma, se informó sobre las prótesis que le habían puesto. Según ha explicado su abogado, tiene una superficie rugosa texturizada que, con el roce de la propia piel, puede causar la aparición de tumores y deben estar retiradas del mercado.