'Cuatro al día', que se ha trasladado a las puertas de la residencia de Lliria, Valencia, donde varios ancianos han sido presuntamente maltratados, ha tenido acceso al e-mail que ha mandado la dirección del centro a los familiares de los residentes que quedan allí. A pesar de estas excusas, muchos hijos y nietos ya esperan con sus coches en la entrada para llevarse, al menos temporalmente, a sus abuelos a casa.
En el correo eléctrónico, la residencia hace refrencia al "vídeo emitido por Telecinco en el que se ve a un residente tirado en el suelo que no recibía auxilio" y explican que estas imágenes se corresponden a "la época del confinamiento". Denuncian la "omisión de socorro" y explican, a modo de justificación, que los vídeos fueron grabados por una empleada de la limpieza cuyo contrato no fue renovado en el pasado mes de agosto:
"Se trata de imágenes grabadas por una extrabajadora cuyo contrato temporal no fue renovado porque no cumplía con sus obligaciones laborales. Esta empleada trabajó en el centro solamente los meses de abril a agosto, como refuerzo del equipo de limpieza durante la crisis".
Este argumento está en la línea de lo dicho por otra trabajadora del centro, que ha hablado esta tarde para 'Cuatro al día': "Ella (su excompañera) está enfadada porque ya no trabaja aquí porque no hacía las cosas bien. Las cosas nos son así. Los ancianos se caen, al igual que los niños", ha sentenciado.