A las puertas de la Navidad, no parece que vayan a bajar los precios de los alimentos antes de la cena de Nochebuena, para la que falta exactamente una semana.
La inflación que sufrimos este año está modificando en parte los hábitos de consumo de los ciudadanos, lo cual hemos podido comprobar en los mercados de distintas ciudades de España. Se venderá, sí, pero de momento vemos cierta contención.
En San Sebastián, en el mercado de La Brecha, los donostiarras ya piensan en la lista de la compra para tener la mesa a punto. Jon, pescadero, asegura que, hasta ahora, lo que más se ha llevado la gente para congelar han sido "los calamares, los chipirones grandes, y luego alguna cola de sapo (rape)". Y detalla que están cogiendo ya los pedidos sobre todo para los días 23 y 24.
En la plaza de Lugo, en el mercado de A Coruña, Gonzalo dice que estamos en una semana de transición pero que "parece que la gente se empieza a animar". No obstante, reconoce que "tenemos bastantes encargos para el día de Nochebuena y de Navidad". Añade que la gente se ha adelantado "un poquito más a congelar" y para hacer las compras, aunque subraya que "todavía hay muchos que no tienen decidido el menú y somos más de clientes de última hora".
Gonzalo detalla que "la actividad se va desarrollando con normalidad" y los precios empiezan a escalar "como todos los años, ya contábamos con eso". El camarón, la cigala y la centolla son los productos que en su puesto más se han llevado para congelar. Es decir, pese al encarecimiento, el marisco sigue siendo el protagonista en los mercados gallegos.
Desde un mercado de Granada, Cindy apunta que el marisco es lo que más ha subido de precio y que lo más económico es "el pescado menudo que usamos para freír como son los boquerones, la bacaladilla (lirios) o los jureles (chicharros)". Eso en cuanto a pescado. Si pensamos en la carne, el choto (cabrito) destaca como el producto más caro. Y en cuanto al postre, la piña es una de las frutas que más se ha encarecido.