La Policía ha detenido por vigésima vez al conocido ya en Alicante como el ‘gastrojeta’, un hombre que, tras una considerable comilona en el restaurante de turno, finge que le da un infarto para así evitar pagar la cuenta.
‘Cuatro al día’ ha entrevistado en directo a Moisés Domenech, dueño del último restaurante afectado, que ha explicado el modus operandi del hombre experto en ‘simpas’ fingiendo desmayos.
El dueño del restaurante se lo tomaba a risas porque el protagonista se ha convertido ya en un personaje de chiste, aunque en el momento del ‘simpa’ no le hizo ninguna gracia.
“En nuestro caso tampoco pidió mucho para comer, pidió una paella y también un wiski con un refresco de cola, el primer cubata se lo tomó de un trago… unos 35 euros”, aseguraba Moisés.
“Cuando terminó, se levantó sin pedir la cuenta ni nada y se dirigió a la puerta… un compañero le paró para recriminarle que tenía que pagar y dijo que tenía que ir al hotel a por el dinero, mi compañero le dijo que no, que tenía que pagar o llamaríamos a la policía”, cuenta.
“Lo que hizo poco después es como que se desvanecía, pero despacio, se apoyó en el suelo… ya cuando vino la policía nos dijo que era la vigésima vez que le detenían”, contaba el dueño del restaurante en ‘Cuatro al día’.