La sequía sigue haciendo estragos en muchas partes de España. Más de 80.000 vecinos de la provincia de Córdoba están sin agua potable y tienen que recurrir a camiones cisterna ya que el agua del embalse que les solía abastecer hasta ahora ha sido declarada no apta para el consumo.
Un equipo de ‘Cuatro al día’ se ha desplazado hasta varios de los 24 pueblos afectados. En primer lugar, la reportera conectaba en directo desde Pozo Blanco, donde los vecinos hacían cola para rellenar las garrafas de agua.
“No nos queda otra”, asegura uno de los vecinos con dos hijos a su cargo, garrafa en mano y mientras hace la cola para recoger el agua del camión cisterna. Un camión que lleva 48 horas instalado en el pueblo para que los vecinos puedan abastecerse
Salud de la Junta de Andalucía asegura que el agua que les dotaba hasta ahora no es apta para el consumo ya que los niveles de carbono orgánico son superiores a los que deberían ser con lo que el agua de los grifos no es apta ni para beber ni para cocinar.
El equipo de ‘CAD’ también ha estado en Alcaracejos, otro de los pueblos afectados. Allí el agua sale de los grifos de color amarillento, opaca y con un olor extraño. “Estamos como en los años 60 o 70, como cuando nuestros abuelos”, asegura una de las vecinas. La desesperación de los afectados va en aumento ya que no saben hasta cuándo va a durar esta situación.