Jesús Calleja viaja hasta el corazón de la Sierra de Gredos con su equipo de ‘Volando Voy’. En Arenas de San Pedro conoce a Alberto Barranco, el director de la banda municipal de música de la localidad. Alberto comparte con Calleja cómo ha sido su inesperada transición de dirigir en capitales europeas como Londres a un entorno rural y cercano como el de esta localidad abulense.
El significado de éxito es distinto para cada persona y un claro ejemplo de ello es el director de orquesta Alberto Barranco. Tras formarse en el conservatorio, dio el salto internacional y estuvo dirigiendo en ciudades europeas como Londres, donde estuvo a cargo de la London City Orchestra. Pero un día decidió cambiar de rumbo y ahora capitanea la banda municipal de música de Arenas de San Pedro.
La tradición musical de Arenas de San Pedro es longeva, pues comenzó hace más de 140 años. En 2018, cuando Alberto Barranco llegó a la localidad, apenas 14 vecinos estaban inscritos. Desde entonces, el director de música se ha encargado de ir captando a más y más vecinos melómanos y actualmente son 55 personas las que forman parte de la banda municipal de música de Arenas de San Pedro.
Todos en la banda participan por amor al arte, que diríamos, o a la música, en este caso. No hay remuneración alguna, ni tampoco lujos, como detecta el equipo de ‘Volando Voy’ al visitar la sala en la que ensayan semanalmente. Jesús Calleja se pone manos a la obra para encontrar una nueva sala de ensayo y que pueda continuar así la tradición musical que tanto anima a los vecinos de Arenas.
Una figura clave de la banda es Alberto Barranco, su director, con quien Jesús Calleja se sienta a hablar en su pequeña, a la vez que acogedora, sala de ensayo actual. El músico explica al aventurero qué propició este cambio y cómo se siente en Arenas de San Pedro.
“Me enamoró. Vine aquí de casualidad, porque no había venido nunca, y fue llegar, que venía de Madrid, vi toda la Sierra de Gredos y me dio como un golpe el corazón, sentí que era mi lugar”, cuenta Alberto, de raíces sorianas.
El musico explica a Calleja que lleva formándose en el mundo de la música desde pequeño, con clases y titulaciones en el conservatorio. También muestra su lado más personal, y le confiesa que su llegada a Arenas de San Pedro coincidió con un momento complicado en su vida: “Era un momento difícil, justo me había separado de mi pareja, que habíamos vivido 10 años en Londres juntos… Cuando él se fue, fue difícil y esto me dio la vida”.