El estado de Israel está ubicado en la región de Oriente Próximo a orillas del Mediterráneo. Su capital, la antigua ciudad amurallada de Jerusalén, es el eje espiritual y lugar sagrado de las tres principales religiones monoteístas: musulmanes, cristianos y judíos. Es imprescindible que recorras los cuatro barrios de la ciudad vieja y descubras la explanada de las mezquitas, el santo sepulcro y el muro de las lamentaciones. Sube al monte de los olivos para contemplar la vista de la ciudad y visita el cementerio judío más importante del país. Te aconsejamos la excursión al desierto de Judea para ver las ruinas de Masada, la antigua fortaleza de Herodes y, por supuesto, descender hasta el mar Muerto, el punto más profundo del planeta. No puedes irte de allí sin pegarte un baño y experimentar la flotación en sus terapéuticas aguas.
Tel Aviv es la segunda ciudad del país, cosmopolita, diversa, una gran metrópoli de espíritu integrador en la que se respira modernidad. Piérdete por las calles de Jaffa (su casco antiguo), conoce Neve Tzedek (su barrio más bohemio), recorre los más de 3 km de paseo marítimo... y descubre su ambiente nocturno... ¡no te arrepentirás!
En Tel Aviv es muy común transportarse en bicicleta eléctrica o patinete, ya que hay muchísimo tráfico. Si optas por el transporte privado, te aconsejamos que uses la app de get taxi, es la compañía israelí de taxis que funciona a la perfección en todo el país.
La comida israelí es una fusión de la gastronomía del mundo gracias a los judíos procedentes de más de 120 países. Sin embargo, hay varios platos típicos que son los más consumidos: Hummus (garbanzos, zumo de limón, tahini y aceite de oliva), pan de pita, falafel (croquetas elaboradas con garbanzos), Shawarma (carne sazonada en un asador vertical y giratorio), Labneh (queso cremoso de aspecto similiar a yogurth),... o los dulces árabes.
La oferta hotelera en Israel es muy variada pero, en general, el alojamiento es caro. Si quieres vivir una experiencia religiosa 360º, te aconsejamos el hotel Notre Dame en Jerusalén, propiedad del Vaticano. En Tel Aviv puedes optar por uno de los mejores hoteles de la ciudad, The Norman, en donde han llegado a alojarse celebrities como... ¡Sarah Jessica Parker!