Un experto en derecho, sobre la demanda de Bárbara Rey a la revista que publicó sus fotos con el rey emérito: "Ese delito no existe en Holanda"

El pasado miércoles, las fotos jamás vistas entre los encuentros de Bárbara Rey y Juan Carlos I salieron a la luz gracias a su publicación en una revista holandesa. Unas imágenes que habrían sido tomadas por el hijo de la artista, Ángel Cristo Jr, por orden de su madre. Tras esta publicación, Bárbara Rey ha decidido tomar cartas en el asunto y ha demandado a la revista y en 'Todo es mentira' averiguamos de manos de un experto en derecho su recorrido legal.

José Montero, experto en derecho internacional, comienza señalando que tiene pocas posibilidades: "En Holanda no existe el delito de revelación de secretos entre particulares como existe en España, solamente de funcionarios públicos, que no sería el caso". Además, asegura, que Bárbara Rey ha demandado por la vía civil para que retiren las fotos y conseguir una compensación económica.

Aún así, confiesa que el recorrido de esta demanda también va a ser corto y señala, que quizá haya "intenciones falsas", que van más allá de la obtención o la retirada de esas fotografías: "Pudieran haber sido filtrada intencionalmente y ahora estar haciendo un poco de luz de gas, todo pinta que va por ahí".

El recorrido legal en España podría complicarse para Ángel Cristo Jr

Sin embargo, José Montero si añade, que el recorrido legal y donde se puede montar el espectáculo jurídico va a ser en España ya que, quien lo haya publicado, si ha generado una revelación de secretos: "No se aplicaría la ley de revelación secretos oficiales, pero está claro que era un secreto aunque conocido a voces, pero ningún español lo había visto esas imágenes".

Ante este planteamiento de este experto en derecho, Marta Flich planteaba si en España se podría demandar a Ángel Cristo Jr por facilitar estas fotografías en otro país: "Aquí es un delito de revelación de secretos muy grave y las amenazas de publicar más fotos insinuando que son aún más fuertes es un delito de coacciones y amenazas". Además, al repetir el hecho de publicar fotos, se convertiría en un delito continuado.