La ciudad de Salamanca se ha visto envuelta en la polémica. En una de sus calles, mientras se realizaba una carrera de tacones conmemorando el Día Internacional del Orgullo LGTBI, pasaba a la vez una procesión religiosa. Esto generó momentos de tensión entre la policía y las personas que allí se encontraban. 'Todo es mentira' ha hablado con la presentadora del acto para conocer qué ocurrió.
Existen dos versiones oficiales, según el Ayuntamiento de Salamanca, los encargados de la procesión religiosa habían pedido permiso antes y por otro, los organizadores del Orgullo salmantino que, aseguran, que nadie les dijo nada hasta que un policía les paró la fiesta para permitir que la procesión cruzase por el mismo lugar.
Sarah Santaolalla, colaboradora de 'TEM' y presentadora del acto, conectaba con el programa y nos relataba lo que pasó: "Yo me sentí delincuente, estábamos presentando una carrera de tacones, que se lleva celebrando tres años y nunca había habido ningún problema. Sin embargo ayer estábamos haciendo las diversas actividades del acto y aparece un policía para decirnos que lo tenemos que cortar porque en 20 minutos va a pasar una procesión".
Respecto a las palabras del Ayuntamiento de Salamanca, Sarah señalaba: "Por mucho que ellos quieran decir había un permiso antes que otro, aún así no se pueden conceder dos permisos en la misma calle. Con lo grande que es la ciudad por qué hay que cruzar a la misma hora por la misma calle".
La presentadora del acto, sobre el momento en el que el policía les dijo que tenían que parar la carrera de tacones subrayaba: "No nos dio ninguna explicación, encima vino y nos exigió que parásemos la carrera de tacones porque tenía que pasar la procesión. Fue alucinante".