Jenni Hermoso ha decidido formalizar su denuncia por el beso no consentido de Luis Rubiales en la final del mundial de fútbol femenino y ha declarado ante la Fiscalía.
'Todo es mentira' ha hablado en directo con el magistrado y jurista Ignacio González Vega sobre las consecuencias legales que puede tener esta denuncia: "Esto lo que hace es poner en marcha el procedimineto judicial. No hay que olvidar que estos hechos se cometen en Australia y para poder activar el procedimiento judicial era preciso o bien la denuncia de la perjudicada o bien querella del ministerio fiscal. Ahora se activa este procedimiento, entramos en una diligencias judiciales y habrá que ver la instrucción de la causa y si llega a juicio cuál es el fallo de la sentencia".
Ignacio González ha respondido a qué pena podría enfrentrase Luis Rubiales ante esta denuncia: "Viendo las imágenes podríamos ver en su caso un delito de agresión sexual y este establece una pena de uno a cuatro años de prisión, pero si es verdad que después establece una serie de atenuaciones que pueden reducirla". Y explica estos atenuantes: "Según el párrafo último del artículo 178 establece que si los hechos revisten menor gravedad o atendida a las circunstancias personales el autor, la pena podría ir no de uno a cuatro años, sino de uno a dos años o bien en vez de una pena privativa de libertad hablaramos de una pena de multa. En el sentido de bajar la pena si al final se bajase".
Risto Mejide ha preguntado al magistrado si a tenor de las imágenes ve recorrido a esta denuncia de Jenni Hermoso: "Recorrido puede tener, otra cosa es que una vez que se escuchen las declaraciones de las partes el Tribunal o el Juez aprecie que esos hechos revistes caracteres de delito. Indiciariamente podríamos estar en presencia de un delito de agresión sexual, pero si es verdad que tiene sus matices, habrá que ver si es un acto que atenta contra la libertad sexual de Jenni Hermoso.
"El abuso de poder podría tener recorrido siempre que hablemos de un acto contra la libertad sexual porque habría esa grabación de esa situación de superioridad en la que se encuentra el autor de los hechos ante la victima", explica Ignacio y añade: "Por un lado me parece que la denuncia de Jenni es algo coherente con los comunicados que había emitido, pero por otro el problema de judializar estos hechos es que si la sentencia es absolutoria vamos de una parte de la otra de la valoración de los hechos, si es delito es algo recriminable, pero si no es delito es algo que es socialmente permitido y creo que tampoco tiene que ser así, no es jugar al todo o nada. Los hechos que ha cometido el señor Rubiales son en todo caso socialmente inaceptables".