Los responsables de salud pública en Alemania están recomendando adaptar la siesta española en su horario de trabajo en verano. 'Todo es mentira' ha hablado sobre esto con Eduard Estivill, director de la Unidad del sueño de Cataluña.
"Nosotros no hacemos la siesta porque somos más vagos o porque nos gusta trabajar menos, sino porque seguimos nuestros ritmos biológicos. Sabemos que nuestro cerebro tiene dos momentos en 24 horas que necesita dormir, uno es el periodo nocturno y después de ocho horas de habernos levantado necesitamos dormir veinte minutos que es la siesta", ha explicado este experto.
Eduard explica que echarnos la siesta no va a hacer que tengamos menos calor: "Lo que hay que entender es que el calor nos afecta a nuestro sueño porque nos impide bajar a una fase profunda de sueño, nos hace dormir en una fase superficial, si intentamos dormir la siesta recuperamos un poco este mal dormir".
Y explica cómo se puede inducir al sueño cuando se tiene mucho calor: "La piel del cuerpo durante el día va elevandose, para enfriar esta piel para poder empezar a dormir sería bueno ducharse con agua fría como minímo dos horas antes de acostarnos y es muy importante hidratarse".