Este es el pueblo medieval mejor conservado del mundo y está en España

En el corazón de la provincia de Segovia, en la comunidad autónoma de Castilla y León, se esconde una joya arquitectónica que parece haberse congelado en el tiempo. Pedraza, una pequeña villa medieval de apenas 400 habitantes, se alza sobre un cerro rocoso como un centinela silencioso de la historia española. Con sus calles empedradas, sus casas señoriales y su imponente castillo, Pedraza no solo es considerada una de las villas medievales mejor conservadas de España, sino que muchos la califican como el pueblo medieval mejor preservado del mundo.

Este enclave histórico, declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1951, ofrece a sus visitantes una experiencia única de inmersión en el pasado. Al cruzar su única puerta de entrada, la Puerta de la Villa, los visitantes se encuentran transportados a una época en la que caballeros y damas paseaban por sus calles, y el bullicio de los mercados medievales llenaba el aire. La autenticidad y el cuidado con el que se ha mantenido Pedraza la convierten en un destino imprescindible para los amantes de la historia y la arquitectura medieval.

Historia y características de Pedraza

La historia de Pedraza se remonta a la época prerromana, aunque su configuración actual data principalmente de los siglos XIII al XVI. Durante la Edad Media, la villa fue un importante centro comercial y estratégico, protegido por sus murallas y su ubicación privilegiada en lo alto de un cerro. Esta posición no solo le proporcionaba una defensa natural, sino que también le otorgaba un control visual sobre el valle circundante.

Una de las características más notables de Pedraza es su trazado urbano, que se ha mantenido prácticamente intacto desde la Edad Media. Las calles estrechas y sinuosas, típicas de los asentamientos medievales, convergen en la Plaza Mayor, el corazón de la vida social y comercial de la villa. Esta plaza, rodeada de soportales y edificios nobles, es un ejemplo perfecto de la arquitectura castellana del siglo XVI.

Puntos de interés en Pedraza

  1. El Castillo: En lo más alto de la villa se encuentra el Castillo de Pedraza, una fortaleza del siglo XIII que domina el paisaje. Aunque su interior no está abierto al público de forma regular, su imponente silueta es visible desde casi cualquier punto del pueblo. El castillo fue propiedad de la familia Velasco y, curiosamente, albergó como prisioneros a los hijos del rey Francisco I de Francia en el siglo XVI.
  2. La Puerta de la Villa: Esta es la única entrada al recinto amurallado de Pedraza. Data del siglo XI y está coronada por el escudo de la familia Velasco. Cruzar esta puerta es como atravesar un portal hacia el pasado.
  3. La Plaza Mayor: El corazón de Pedraza es su plaza porticada, un espacio que parece sacado directamente de un cuento medieval. Aquí se encuentra la iglesia de San Juan Bautista, del siglo XVI, y numerosas casas solariegas con escudos nobiliarios.
  4. La Cárcel de la Villa: Este edificio del siglo XIII, que funcionó como prisión hasta el siglo XIX, ahora alberga un interesante museo que muestra la historia de Pedraza y sus tradiciones.
  5. Las casas nobiliarias: A lo largo de las calles de Pedraza, los visitantes pueden admirar numerosas casas señoriales con sus escudos heráldicos, testimonio de la importancia que tuvo la villa en el pasado.
  6. El Museo de Zuloaga: Situado en el castillo, este museo alberga una colección de obras del pintor vasco Ignacio Zuloaga, quien vivió en Pedraza y contribuyó significativamente a su restauración y preservación.

Cómo visitar Pedraza

Pedraza se encuentra a unos 37 kilómetros al noreste de Segovia capital y a unos 125 kilómetros de Madrid. La forma más cómoda de llegar es en coche, ya que permite explorar también los alrededores. Desde Madrid, se puede tomar la A-1 hacia Burgos y luego desviarse hacia Pedraza. Desde Segovia, se llega tomando la N-110 y luego la SG-205.

Para quienes prefieran el transporte público, existen autobuses que conectan Segovia con Pedraza, aunque los servicios son limitados. Es recomendable consultar los horarios con antelación.

La mejor época para visitar Pedraza es durante la primavera o el otoño, cuando el clima es agradable y se pueden disfrutar plenamente los paseos por sus calles empedradas. Sin embargo, Pedraza ofrece experiencias únicas durante todo el año:

  • En julio, la villa celebra los "Conciertos de las Velas", un evento mágico en el que todo el pueblo se ilumina con miles de velas mientras se disfruta de música clásica en la plaza.
  • En octubre, tiene lugar la Fiesta de la Matanza, una celebración gastronómica que atrae a numerosos visitantes.
  • En invierno, Pedraza se cubre de un encanto especial, especialmente si la nieve hace acto de presencia, creando postales de cuento.

Para una visita completa, se recomienda dedicar al menos un día entero a recorrer Pedraza. Existen visitas guiadas que permiten descubrir los secretos y la historia de la villa de la mano de expertos locales. Además, Pedraza cuenta con una oferta gastronómica notable, con restaurantes que ofrecen platos típicos de la región como el cordero asado o el cochinillo.

En cuanto al alojamiento, aunque Pedraza es pequeña, cuenta con varias opciones de hoteles y casas rurales dentro del recinto amurallado, permitiendo a los visitantes sumergirse completamente en la atmósfera medieval.

Pedraza no es solo un destino turístico, es una ventana al pasado, un testimonio vivo de la historia española y europea. Su cuidada preservación y la autenticidad de su entorno la convierten en un lugar único en el mundo, un verdadero tesoro medieval que espera ser descubierto por aquellos que buscan una experiencia inolvidable en el corazón de España.

*Este texto ha sido generado con ayuda de Inteligencia Artificial, guiado y editado por el autor.

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